Daniel Maldini hizo su debut en la Serie A con la camiseta del Milan, en el empate (1-1) contra el Hellas Verona, y abrió el tercer capítulo de la saga Maldini en el club milanés, después de Cesare y Paolo.

Daniel Maldini, delantero de 18 años, saltó al campo en San Siro en el minuto 93 en sustitución de Samu Castillejo y convirtió en realidad un sueño que tenía desde que, en su niñez, entró en los juveniles del club en el que tanto su abuelo, Cesare, como su padre, Paolo, hicieron historia.

Si tanto su abuelo como su padre fueron leyendas del fútbol como defensas, Daniel creció como delantero y fue premiado con el estreno en la Serie A por el técnico Stefano Pioli, que lo convocó y luego lo hizo debutar un día en el que no pudo contar con Zlatan Ibrahimovic, ausente por gripe.

El joven punta, que lleva siete goles en 17 partidos disputados con los juveniles, ya había jugado el pasado verano con el Milan en unos amistosos contra Bayern, Benfica y Manchester United, y también había sido convocado anteriormente en tres partidos de la Serie A, pero no había debutado. Un día soñado que llegó en San Siro, bajo la atenta mirada de su padre, Paolo, actual directivo de la entidad milanista. "Este debut era un objetivo que tenía. Ahora espero seguir por este camino. Sentí una emoción fuerte, aunque mi padre me sostiene y tranquiliza", señaló el delantero.

Se abrió así el tercer capítulo de una saga legendaria que empezó hace 66 años, en 1954, cuando Cesare Maldini jugó el primero de los 412 encuentros que disputó con la camiseta rossonera hasta 1966, logrando además de varios títulos de liga una Copa de Europa (1963) ante el Benfica. Cesare también entrenó al Milan entre 1972 y 1974, conquistando una Copa Italia y una Recopa de Europa.

El segundo capítulo lo protagonizó Paolo Maldini, quien debutó en la Serie A con 16 años, en 1985, y disputó un total de 902 partidos. Fue protagonista, líder y capitán de tres décadas del Milan, en las que el club conquistó cinco Copas de Europa y siete ligas, entre otros títulos. Volvió a entrar en el club en 2018, con el cargo de director del área técnica.

Y este domingo, once años después de la despedida como futbolista de su padre, llegó el momento de su hijo Daniel, quien saltó al campo, aunque sólo por un minuto, con la camiseta número 98.