Valencia básket - Cajasol · la crónica

Adiós con alma de campeón (87-84)

  • El Cajasol despide la campaña haciendo temblar Valencia tras un partidazo que casi lleva a la prórroga.

Ovación a lo grande, aplauso multitudinario y algún homenaje de Caixabank merece este equipo tras deleitar al baloncesto español con una temporada de matrícula. Es para quitarse el sombrero y aplaudir a estos chicos que se quedaron a las puertas de una clasificación histórica, por la edad media del plantel, a las semifinales de la Liga Endesa tras un partidazo que hizo temblar Valencia, con la Fuente de San Luis entera con el corazón en un puño cuando Bamforth lanzó sobre la bocina desde su casa un triple para forzar la prórroga que repelió el aro ante el suspiro feliz del campeón de la Eurocup. 

Según la filosofía de Aíto, la victoria y la derrota son circunstanciales, pero lo que nunca puede perderse es el alma de campeón, la lucha, el sacrificio, el carácter, la competitividad. El técnico ha convertido a diamantes en bruto en una corona repleta de joyas con un precio incalculable en algún caso -¿cuánto vale Porzingis-. Cayó con las botas puestas y murió creyendo en que podía mandar a la cuneta a uno de los bloques en mejor forma del continente. Le faltó una pizca de suerte. 

Recibió golpes, los arreones clásicos del conjunto de Perasovic, en varias ocasiones y en cada una de ellas se levantó de la lona y alzó de nuevo los puños. No tiró la toalla. Satoransky, menor en los dos duelos previos, se erigió en jefe de la juvenil tropa repartiendo juego, asistencia aquí y allá (11 en total) para desarbolar la asfixiante defensa levantina. La sorpresa de Aíto fue Sastre, integrado en el cinco inicial. El capitán echó una mano en la zona 2-3 planteada al final del tercer cuarto por los hispalenses. El Valencia, por cierto, sí tuvo fortuna en los tiros sobre la bocina antes de cerrarse los parciales, con triples de Sato, antes del descanso, y Aguilar, previo al último acto... Eran lanzamientos librados pero susceptibles de fallo, aunque también metió uno increíble Satoransky lanzando a una pierna. 

No zozobró el Cajasol, firme, en pie, intimidando con sus torres y colocando tapones de mérito, sobre todo Balvin, que creció en defensa, no así en ataque. Hernangómez mareó con su juego de pies y contribuyó a que los hispalenses estuvieran cerca de la presa, incluso por delante de ella. 

A la baja visitante de Franch se unió la local de Dubljevic y Aíto ordenó que balones dentro. Le pasó factura a Lishchuk a base de faltas, aunque los valencianos sacaron ventaja en su gran especialidad: el triple. Lafayette y un sobresaliente Aguilar golpearon desde el 6,75: 46-41 en el intermedio y mucha tela por cortar tras superar un primer latigazo de ocho puntos. 

Landry y Bamforth, al son de un Satoransky de bandera, le dijeron a los de naranja que esto no iba a ser coser y cantar. Con un parcial de 0-8, por encima nuevamente: 46-49. Un palmeo de Sato y una contra tras robo de Van Rossom levantaron la Fonteta y un triple de Lafayette elevó a ocho otra vez la horquilla (63-55). Tranquilidad en el frente. Seis puntos de Hernangómez y un matazo de Porzingis equilibraron. Tablas y dando espectáculo. 

Tres tirones más dieron los levantinos en el último periodo para colocarse ocho por delante. Aíto quitó la zona, Landry y Bamforth emergieron y, estando a tres (74-71), se sucedieron los errores. Lafayette, con Doellman missing -y nervioso cometiendo una antideportiva de libro al sacar los codos a Satoransky-, jugaba solo, pero el Cajasol tenía fe y daba gloria ver cómo culminaba una contra con un alley oop entre Bamforth y Porzingis o los mates del checo a menos de dos minutos. El escolta colocó a los niños a tres de los hombres y el base bajó a dos antes de que Van Rossom subiera a tres a cinco segundos. Entonces voló desde el más allá el triple de Bamforth que dejó sin respiración a Valencia entera. No entró, el Caja perdió y el baloncesto ganó. Ojalá Sevilla aproveche su momento. 

Ficha Técnica:

87.- Valencia Basket (20+26+20+21): Van Rossom (8), Rafa Martínez (5), Sato (10), Doellman (10), Triguero (4) -cinco titular- Ribas (2), Lishchuk (4), Lucic (8), Lafayette (22) y Aguilar (14).

84.- Cajasol (19+22+22+21): Satoransky (17), Bamforth (17), Sastre (-), Landry (16), Balvin (4) -cinco titular- Radicevic (5), Porzingis (9), Burjanadze (-), Hernangómez (14), Mata (2) y Urtasun (-).

Árbitros: Arteaga, Pérez Pizarro y Perea. Eliminaron por faltas personales al local Lishchuk (m.32) y al visitante Porzingis (m.39)

Incidencias: Tercer partido de la eliminatoria de cuartos de final disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 8.300 espectadores.

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