Caixabank debe definir su posición respecto al club con vistas al porvenir inmediato y en el Cajasol están a la espera de que en Barcelona decidan si continúan como propietarios del equipo hispalense o si han encontrado un comprador -también existe la posibilidad de que sea un socio- para el próximo curso. Desde luego, la entidad financiera no tiene previsto desvincularse por completo del baloncesto en Sevilla, aunque lleve desde el principio avisando de que en su plan de negocio no entra ser dueño de un club, aunque sí ven con buenos ojos desde Cataluña la relación con la Federación Española de Baloncesto, no sólo por razones fiscales, sino por el componente nacional y no local del asunto.

De estas relevantes cuestiones hablarán hoy el presidente del Cajasol, Fernando Moral, y el aún entrenador del equipo, Aíto García Reneses, que tienen intención de almorzar juntos este mediodía para que el directivo ponga al día al técnico, en la medida de sus posibilidades.

La base del proyecto -la que pueda conocer el presidente a estas alturas sin presupuesto todavía encima de la mesa- será el principal tema de conversación de Moral y Aíto, que mañana dará una charla por la tarde en la Universidad Pablo de Olavide antes de comenzar el miércoles las vacaciones, como algunos de sus jugadores, ya desfilando con destino a sus respectivas casas.

El Cajasol cuenta con la continuidad de Aíto, pero es éste quien necesita garantías de que la plantilla mejorará respecto a esta temporada o al menos no irá a peor, pese a que la marcha de Tomas Satoransky se da por casi segura. En los esquemas del preparador pasa que no se vaya Kristaps Porzingis, con contrato por varios años pero seducido por la NBA y a quien le queda una semana para salir de la lista de elegibles para el próximo draft.

También el ilustre entrenador querrá estar al tanto de quién puede ser el candidato a suplir a Satoransky si se fuera -parece claro que Radicevic dará el salto a segundo base-, si Hernangómez continuará en el barco otra campaña como cedido, si Sastre tiene opciones de renovación, si Landry pudiera ser atado a un precio asequible o incluso cuándo podría saber el club si va a estar presente en la Eurocup.

Muchos puntos a tratar entre el presidente y el técnico, aunque muy pocas certezas aún.