La marcha de Isaac de la portería del UD Tomares (entendible que a sus 38 años haya buscado su retirada) le ha abierto la puerta del San Sebastián a un portero experimentado (28) de un físico impresionante. Procedente del UD Bellavista y un clásico anteriormente también en el Lora CF que este verano se va a jugar ante el Camas el ascenso a División de Honor, Álvaro Acosta Pizarraya es un tiarrón de 2,06 metros que llega muy ilusionado a dar un salto en su carrera.

Ya la pasada temporada, antes de su inicio, tuvo conversaciones con la posibilidad de recalar en uno de los equipos que han estado toda la temporada arriba en División de Honor, pero temas laborales y que ya estaba comprometido con el Bellavista, en Primera Provincial, impidieron que se diera el caso.

Pero Álvaro es mucho más que un portero de más de dos metros. Muy coordinado y tremendamente ágil para su espectacular fisonomía, esconde una de sus mejores virtudes en su espectacular golpeo con el pie. Pero espectacular... hasta el punto de ser un arma mortífera para los rivales en cualquier campo, mucho más en un estadio pequeño. En volea en saques de continuidad o en parado en saques de inicio o faltas fuera del área propia sus lanzamientos convierten en un obús, un balón tenso y fuerte en el área rival equivalente a un córner o una falta lateral. Un golpeo seco, fuerte, plano... de los que temen los defensas y que hace las delicias de los compañeros más vivos en el área y atentos a cualquier rechace.

En este sentido el Tomares, que ha renovado también su portería con el sub 23 Alex Carmona, procedente del Antoniano, sigue un poco la filosofía que tenía con Isaac, otro hombre de excelente golpeo también en este tipo de acciones.

Todos los entrenadores que han tenido a Álvaro defienden sin dudarlo que es un portero de superior categoría que perfectamente podía competir en Tercera División como mínimo y destacan su formalidad y competitividad. El paso dado es ilusionante. Ahora, que le respeten las lesiones...