El Barcelona no pudo sellar su pase a la Final Four de Madrid al caer en el Nokia Arena frente al Maccabi por un claro 88-75, en un encuentro que comenzó de cara pero terminó sentenciado tras la expulsión de Basile.

Los discípulos de Xavi Pascual comenzaron haciendo daño en la pintura, pero tan pronto como despertó el Maccabi, acabó el sueño del Barcelona. El equipo español fue de más a menos. Comenzó a diluirse en cuanto los de Zvi Sherf subieron la presión en defensa y acabó hundido con la expulsión tras una tángana de Gianluca Basile. El acierto en la línea de tres -destacando Bluthenthal- hizo el resto para enterrar las aspiraciones catalanas.

La escuadra macabea demostró aprender de los errores del inicio, y no tardó en blindar la zona. La buena actitud local marcó las diferencias entre ambos conjuntos, permitiendo al conjunto israelí marcharse al descanso con una renta de nueve puntos.

El Barça se recuperó por la agresividad de Grimau y la buena actuación de Vázquez para conseguir un parcial de 0-7. La reacción local llegó, pero el factor que terminó por decantar la balanza del lado macabeo fue la expulsión de Basile. La excesiva dureza en defensa de Sharp provocó la ira del italiano, que se revolvió para agredir a su par desde el suelo. El escolta, héroe en el Palau, fue expulsado de manera fulminante. Los barcelonistas se desmoronaron definitivamente.