José Mourinho comenzó a jugar ayer el partido del miércoles ante el Borussia Dortmund con una inesperada aparición ante la prensa, a la que ofreció su perfil más camaleónico y algún dardo dirigido al rival alemán. Se esperaba una rutinaria aparición del segundo de Mourinho, Aitor Karanka, en la previa del partido ante el Betis, pero la sorpresa fue mayúscula cuando se vio a Mourinho aparecer por la puerta de la sala de prensa.

El técnico portugués negó que haya dicho en privado que se quiera ir del Real Madrid y remitió al final de temporada para aclarar su futuro y habló muy poco del Betis y de la situación de su equipo en la Liga española. "Es la primera vez que me quedo tan descolgado en el campeonato nacional. Si preguntas a un millón de madridistas si prefieren ganar al Betis o al Borussia, todos te dicen que al Borussia. Yo quiero ganar a los dos, pero la situación que tenemos nos permite dar más descanso a algunos jugadores", explicó Mourinho, que informó que reservará a Khedira, Sergio Ramos y Xabi Alonso, pero que "el resto puede jugar", incluido Cristiano Ronaldo.

Además, aseguró que afronta una situación nueva en su carrera, con la semifinal ante el Dortmund en el horizonte. "Es una situación diferente, una experiencia buena para mí, porque siempre que he estado en semifinales de Champions, pero discutiendo el campeonato. Es la primera vez que me pasa. Si preguntas a un millón de madridistas si prefieren ganar al Betis o al Borussia, un millón te dirá que prefiere ganarle al Borussia. Yo, como entrenador, tengo que intentar ganar a los dos", afirmó.

Mourinho respeta al Betis, sobre todo su capacidad para jugar a la contra: "Es muy buen equipo, con buenos jugadores, buen entrenador y buena mentalidad. Juegan un fútbol adaptado a ganar partidos fuera. Tiene gente con capacidad de solucionar situaciones en posición ofensiva. Espero que termine bien pero conseguir buen resultado".

El entrenador del Real Madrid, aseguró que tras finalizar la temporada se sentará con el club para hablar de su situación y tomar "una decisión buena para todos", pero volvió a rechazar hablar sobre si tiene o no intención de permanecer en el club la próxima temporada. "He dicho que la relación con el presidente, con José Ángel y otros directivos, es muy buena y eso permite que nos podamos sentar y analizar las cosas con tranquilidad, para decidir qué es lo mejor para el Madrid. Normalmente existen problemas en clubes a llegar a estas situaciones, conmigo no, gracias a mí y a ellos. No estoy infeliz. La decisión tiene que ser la mejor para todos. Me podrá gustar más o menos un cosa, pero pasa en todos lados; no existe el club perfecto ni el entrenador perfecto", aseguró.