El Sevilla adelantó el desenlace del campeonato de División de Honor venciendo al Córdoba en la ciudad deportiva y proclamándose campeón a falta de seis jornadas.

Poca historia tuvo el choque que le medía a un correoso equipo cordobés, que acudió a la cota con la intención de dar la sorpresa y arrancar unos puntos que se antojaron imposibles vistos los méritos de ambos en el terreno de juego, pese a que Ramón Tejada dio descanso a varios de sus titulares habituales para la cita del equipo en el torneo internacional juvenil que se disputará en Berlín durante la Semana Santa.

Con Pukki en el once titular y autor del gol del empate, el equipo se lanzó en busca de un triunfo que suponía el título de forma matemática y logró gracias al buen acierto de sus jugadores de ataque, liderados por un Hugo incisivo en la faceta creativa.

El sevilla reflejó en definitiva lo que apuntó durante todo el curso liguero: una gran superioridad sobre sus contrincantes.