En el papel de la defensa de los intereses del Sevilla, José Castro, su presidente, se puso firme en su comparecencia de ayer en un acto promocional con la firma Volkswagen. Varios temas encima del tapete en ausencia de competición, con lo que eso magnifica las cosas que son extradeportivas, y ahí al máximo mandatario del club nervionense no le tembló el pulso para poner a cada cual en su sitio. Primero con la Liga de Tebas y el desigual reparto televisivo, luego con la defensa a ultranza de Unai Emery frente a las críticas, el ébola y la situación de Mbia, los rumores sobre Monchi, el caso de Iborra...

A Castro le sobraron pelos en la lengua para gritar a los cuatro vientos que esta Liga está adulterada. Para quien recogiera el mensaje, las cosas estaban muy claras en el discurso del presidente del Sevilla, recuerda a la cruzada que ya inició su antecesor. "Esta Liga está adulterada por unos repartos de los derechos televisivos que no son equitativos. Madrid y Barcelona tienen una diferencia enorme sobre el resto, más presupuesto y más equipo. Lo del Atlético el año pasado fue una bendita excepción porque al final estarán arriba los que tienen esas grandes posibilidades, los que ganan más y pueden fichar a los mejores. Otra cosa es que intentemos conseguir los objetivos máximos, pero puede ser una utopía", comentó un Castro enérgico y seguro de sí mismo.

Convencido de su discurso, continuó esperando que se produzcan novedades en otro sentido. La semilla que se plantó hace ya casi tres años ha germinado y puede dar sus frutos. "Se espera que pronto haya noticias y esperemos que sean buenas. No sé si para arreglar el problema de una vez, o paliarlo, pero se esperan medidas a través de la Liga en el sentido de que esos derechos sean repartidos por la propia LFP y no en negociaciones directas de los clubes con las empresas. Cuando sea la LFP la que haga ese reparto, hay unas pautas marcadas. Esperamos que pronto haya noticias porque, si no se arregla, la competitividad seguirá bajando. Lo lógico es que hubiera cuatro, cinco, seis equipos que optasen al título, pero aquí sólo optan dos porque sus presupuestos son enormemente altos y no es de recibo que haya diferencias tan enormes. Y esos clubes no tendrán prisa, pero sí los demás".

Castro tuvo que defender también el crédito de su entrenador, cuyas decisiones se siguen discutiendo por la derrota en el Calderón pese al gran arranque liguero y la posición que tiene el equipo en la tabla, tercero con 16 puntos. "Es el entrenador que, junto a Juande Ramos, nos ha hecho campeones de Europa. Sabe lo que tiene que hacer y la entidad está al cien por cien con él, por su trabajo, su constancia, su buen hacer. Y porque siente los colores del Sevilla merece que estemos con él. Respetamos sus decisiones y, como Bacca puede fallar un penalti, él también se puede equivocar en un partido. Lo importante es que estamos ahí, terceros, y tenemos una buena plantilla y un buen entrenador. Cometerá errores como cualquiera en cualquier faceta de la vida", dijo.

El ébola y el riesgo de contagio al que se expone Mbia al jugar dos partidos ante Sierra Leona es otro asunto que precisaba la opinión del presidente, pero la postura de club es transmitir tranquilidad. "Estamos más ocupados que preocupados. Ya la FIFA cambió la sede del partido de Sierra Leona a Camerún y el riesgo no es tanto. Habrá tomado las precauciones que haya que tomar. Se han puesto las medidas necesarias para que no lo haya. Que vuelva no es decisión del club, sino del propio jugador. Estamos tranquilos y esperamos y deseamos que nada ocurra", explicó un Castro que también salió a defender a Iborra, involucrado en el caso Levante-Zaragoza: "Está tranquilo, esperando que la justicia dictamine. Sólo puedo decir que es un magnífico profesional, un gran chaval, de un trato exquisito y sólo veo en él tranquilidad".