La trigésima quinta edición del Cross de Itálica promete aunar tradición y novedad. La expectación es máxima. Una evidencia de esto son las más de 3.000 inscripciones confirmadas, entre las que figuran corredores de las categorías benjamín, alevín, infantil, cadete, juvenil y júnior y, cómo no, 42 atletas profesionales que buscarán el triunfo y el prestigio en la prueba internacional.

La belleza de este enclave único atraerá a participantes y espectadores de todas las edades. Las ruinas de Itálica serán testigo un año más del esfuerzo de los intrépidos protagonistas que se lanzarán raudos a completar un circuito que, según apunta la meteorología, lucirá completamente seco. Así, la lluvia de ediciones pasadas dará paso a un sol radiante que a buen seguro calentará los cuerpos y los corazones de los allí presentes.

El Área de Deportes de la Diputación de Sevilla, consciente del auge que han experimentado en los últimos años las carreras populares, ha decidido introducir una novedad bastante reseñable: una prueba exclusivamente para mujeres y con una distancia idéntica a la masculina, es decir, de 6.825 metros.

De esta forma, y en igualdad de condiciones, ellas y ellos lucharán por coronarse en el podio. Pero, sin duda, el plato fuerte de la jornada aguardará en las dos últimas salidas, en las que los 42 profesionales dejarán a un lado el ambiente festivo del lugar para pelear codo con codo por el triunfo. Así, a las 12:25 las mujeres darán cuatro vueltas a un circuito de 8.625 metros, y a las 14:00, los hombres completaran cinco a un trazado superior (11.075 metros). Dos de ellos serán los sucesores de Tamrat Tola y Faith Chepngetich, los triunfadores en la edición del año pasado.