-¿Cómo se siente después de su reencuentro con el gol y la victoria del equipo lograda ante el Mallorca?

-Es mi primer gol en la Liga y estoy muy contento porque ha servido para ganar el partido.

-Dos partidos como titular y dos victorias. ¿Es casualidad que su vuelta al equipo coincida con la reacción?

-Siempre he dicho que estoy trabajando para poder jugar y cuando tengo los minutos procuro dar lo mejor de mí para el equipo y hemos llegado a estas dos victorias conmigo jugando. Pero lo importante, independientemente de quién salga, es dar lo mejor y poder ayudar al equipo. Si tengo otra oportunidad procuraré seguir dando lo mejor y hacer goles.

-¿Cree que ha sido clave para esta vuelta a las victorias el cambio táctico con usted de enganche?

-No, yo creo que el míster sabe lo que hace, procura siempre en cada partido poner los jugadores que se encuentran mejor y, bueno, tuve la oportunidad, intenté ante el Villarreal hacer lo mejor, el domingo tuve otra oportunidad y además salí con un gol. Pero sigo pensando que esta es una plantilla muy grande y todos pueden estar jugando. Después el míster decide a quién poner según el partido.

-Hacía tiempo que no marcaba un gol. ¿Recuerda cuándo fue el último?

-El último que marqué fue en la Liga de Campeones, con el Steaua, que hice dos goles. Luego, en Liga, no había marcado esta temporada. Y estoy feliz por el gol, se lo dedico a mi hijo, que se llama Rafael y nació hace dos semanas, yo buscaba este gol para dedicárselo.

-También se dirigió tras marcar a la afición sevillista en el Ono Estadi. ¿Usted ha seguido sintiendo el cariño de la gente en ese tiempo que no ha estado jugando?

-Sí, la gente me ha tratado muy bien, siempre me da ánimos e incentivos. Me dice que tengo su apoyo y yo procuro trabajar siempre para aprovechar mi oportunidad y ayudar al equipo. El cariño que tengo con la afición del Sevilla es muy grande. Desde que llegué encontré este cariño y les dediqué también el gol a ellos porque nos incentivan y parte del éxito nuestro es por ellos, por su ayuda.

-Lo curioso es que el gol llegó con usted jugando de enganche y cuando al equipo le costaba más llegar arriba. Luego mejoró el Sevilla con su retraso al puesto de medio centro…

-En la primera parte no estábamos encontrando los espacios. Nos cerraron muy bien por la derecha, a Daniel y Jesús Navas, y nos costaba llegar, pero salimos con 0-1. Y en la segunda parte yo me retrasé a la posición de medio centro, que es la que tenía cuando llegué al Sevilla. Y hemos mejorado, buscamos la victoria y la conseguimos.

-Usted siempre ha preferido jugar algo más retrasado, ¿no?

-Yo siempre he dicho que soy medio centro, aunque con Juande Ramos jugaba ya de mediapunta, de enganche. Y la verdad es que en algunos partidos ha salido bien, como en éste, que he metido un gol. Es cierto que cuando he marcado goles ha sido como segundo punta, en las finales con el Milan, con el Madrid, y también con el Steaua en la Liga de Campeones. Yo soy medio centro, pero si tengo que ayudar al equipo como enganche no pasa nada.

-¿Se sintió más cómodo como enganche ante el Villarreal que ante el Mallorca?

-Yo procuro seguir las instrucciones del míster. Conmigo de enganche somos un equipo más defensivo, porque intento neutralizar al medio centro de ellos, en este caso era Basinas. Cuando jugamos con dos delanteros cuesta más volver y tapar al medio centro, pero yo tengo esa tendencia a volver rápido y tapar los espacios porque siempre he sido medio, para que ellos no tengan superioridad en el centro.

-Durante este tiempo que no ha jugado de titular, ¿llegó a pensar que había perdido el sitio en el Sevilla?

-Bueno, yo sé que iba a tener minutos, porque el míster siempre habla conmigo, y sabía que unas veces iba a jugar más y otras menos. Siempre pienso que voy a tener mi oportunidad.

-¿Cree que su forma pausada y nada contestaria de hablar en público facilita que los entrenadores lo sienten en el banquillo?

-No, no. Yo creo que cada uno piensa diferente. Yo respeto al entrenador, sé que lo que hace es por el bien del equipo. No hace falta estar hablando, unas veces entran unos y otras otros, hay que pensar en el grupo, porque tenemos el objetivo un poco más cerca y hay que luchar hasta el final para intentar conseguirlo.

-¿Qué le parecen las palabras de Luis Fabiano quejándose de que Jiménez lo relevase al descanso?

-A Luis lo conocemos ya hace tiempo, no es de hoy (sonríe). Estaba un poquito con la cabeza caliente porque él siempre quiere jugar y ayudar al equipo, tiene el objetivo de ser Pichichi y su enfado es normal. Pero vamos a hablar con él porque lo necesitamos. Ahora Luis podrá hablar con más días y más tranquilo para volver a jugar y volver a marcar.

-¿Cree que su postura es egoísta?

-Cada uno es de una forma, pero hay que respetar y pensar en el grupo.

-La victoria fue clave, más aún tras el empate del Atlético. ¿Cuándo se enteraron del gol de Ogbeche?

-Nos enteramos en el vestuario, por la radio. Era obligatorio ganar. Cumplimos con nuestra parte y sabemos que tenemos que seguir sumando de tres en tres; crea un poco de ansiedad, pero hay que estar tranquilos y seguir cumpliendo con nuestra obligación de ganar. Si no lo logramos, que sea porque no han fallado los de arriba.

-Vaya partidazo de Daniel…

-Está en un gran momento y hay que aprovecharlo. Ojalá que se quede el año que viene para que pueda seguir ayudándonos.

-Eso está un poco difícil…

-Hombre, él habla siempre de eso, es normal. Ahora hay que estar con la mente en la Liga. Siempre habla de que se va y después se queda. Hay un montón de clubes que lo desean y él quiere hacer lo mejor para ser feliz, pero como se quede nos va ayudar mucho.

-¿Usted se siente importante en el Sevilla, o cree que tiene un rol secundario respecto a gente como Daniel, Kanoute, Luis Fabiano…?

-Yo estoy a gusto, he participado en los éxitos del Sevilla y tengo una fidelidad muy grande con el club. Cuando llegué pude jugar y ganar títulos y ojalá pueda cumplir mi contrato y quedarme mucho tiempo aquí.

-¿Tiene la idea de acabar su carrera aquí?

-Bueno, esto me gusta mucho, mi mujer está a gusto en Sevilla, le gusta mucho la ciudad y no hay razón para querer marcharme.