Las dudas exhibidas en las últimas dos semanas por el Inter de Milán a la hora de asegurarse el título de la liga italiana de fútbol son ya carne de diván. "Tiembla el Psico-Inter", se burlaron ayer los medios italianos, que hablaban de la posibilidad de que el equipo sufra de Interinitis, un juego de palabras con la enteritis, una inflamación intestinal.

El Inter empató 2-2 con el Siena en su estadio, y ahora sólo tiene un punto de ventaja sobre la Roma, a la que hace dos semanas superaba por seis, de cara a la última jornada. El sueño del tercer scudetto consecutivo se tambalea, en una deriva que comenzó con la derrota de 2-1 ante el Milan.

El fin de semana fue en cambio memorable para la Roma, que celebró un 2-1 sobre el Atalanta para hacer sentir su aliento en el cuello del grande del norte, que se retiró abucheado por 80.000 espectadores en San Siro, incapaces de entender cómo se desvaneció en tres meses la ventaja de 11 puntos que llevaban. "La desilusión de nuestros fans está más que justificada -dijo el delantero chileno Jiménez-, pero estoy seguro de que ganaremos en Parma".

De haber ganado el domingo, el Inter se habría consagrado campeón, porque con tres puntos de ventaja sobre la Roma, un eventual empate en la cima en la última fecha beneficiaba a los del norte, con mejor balance en los choques con los capitalinos.

Y fue nada menos que Marco Materazzi quien tuvo el triunfo en los pies. Pero falló, porque su penalti fue detenido por Manninger. ¡Qué diferencia con lo sucedido un año atrás! Aquella vez Materazzi convirtió el penalti, también ante el Siena, para asegurar el decimoquinto scudetto.

Queda ahora un vibrante domingo y ningún director de cine hubiera creado un thriller futbolístico más atractivo para el cierre del campeonato. La Roma jugará en Catania, en tanto que el Inter visitará al Parma, que lucha contra el descenso. El Parma estaba dirigido hasta ayer por Héctor Cúper, que entrenó hace años al Inter y perdió un título en la última jornada, al caer ante la Lazio, en beneficio de la Juventus. Pero Cúper, como ya le sucediera este año en el Betis fue destituido ayer.