Zan Tabak lleva casi toda su vida moviéndose en la élite del baloncesto mundial. Plata olímpica en Barcelona con una Croacia de ensueño, campeón de Europa con la Jugoplastika y poseedor de una anillo de la NBA (Rockets, 1994), el croata ha coincidido con grandes nombres en su carrera. Por ello, que destaque a Kirksay como uno de los mejores jugadores que ha conocido, llama la atención.

"Cuando Plaza y yo estábamos en el Real Madrid ya lo quisimos. No tiene una gran técnica individual ni un buen tiro, pero es único. Nunca me he encontrado con alguien así por todo lo que aporta. Más allá de los puntos, los rebotes y las recuperaciones, lo que da al grupo es incalculable. Es el alma del equipo, hace piña en el vestuario y aporta grandes valores al grupo", señaló el croata en Onda Cero.

Y es que la campaña del Cajasol en el primer curso del balcánico en Sevilla está resultando un éxito: clasificado para la Copa del Rey y quintos en la Liga. Sin embargo, Tabak lanza un aviso para navegantes. "Hay que ir paso a paso y no volar antes de tener alas, porque si no la caída será más fuerte. Llevamos rindiendo por encima de nuestras posibilidades toda la temporada y no se nos puede pedir más. Los play off serían, como la Copa, un premio, pero no pueden ser una obligación".

A dos días del regreso cajista a la Copa del Rey, el asistente de Plaza no duda de las posibilidades de los suyos, aunque reconoce que el Barcelona es el peor rival posible en los cruces: "Es uno de los mejores conjuntos de Europa, pero jugando a nuestro nivel podemos tener nuestras opciones. En este torneo siempre hay sorpresas y nosotros lo venimos haciendo bien. Si el encuentro lo llevamos a nuestro terreno, el defensivo, y estamos acertados en ataque, estaremos ahí", destacó Tabak, que añadió: "A cinco partidos y en un play off, nos machacarían, pero a uno solo puede pasar lo que sea. La Copa es mágica".