Lautaro Acosta vive en una nube. Desde su llegada a Sevilla el pasado miércoles, el joven jugador argentino es incapaz de estar dos minutos seguidos sin que se le escape esa sonrisilla que da el nerviosismo por llegar a un lugar desconocido. El ex de Lanús puede dar esa imagen de niño tímido, aunque delante de los medios de comunicación muestra una madurez impropia de una persona con su edad. A la típica pregunta de un nuevo valor en Argentina sobre jugadores de su edad que ya han triunfado en Europa -Aimar, Messi, Agüero...-, Acosta fue tajante. "No soy ni Aimar ni Messi ni Agüero; soy Lautaro y tengo estilo propio. Las comparaciones no son buenas nunca. Yo soy distinto, no mejor ni peor, sólo distinto. Mi estilo se verá reflejado en el campo", afirmó.

En cuanto a su convocatoria con la selección olímpica, el argentino informó de que se incorporará a partir del próximo 23 de julio, por lo que tendrá tiempo para adaptarse al Sevilla. Acosta explicó que primero habló con Monchi para ver la opinión de su actual club: "Me dijeron que lo mejor para mí era ir con la selección". "Estoy dispuesto a hacer el esfuerzo necesario para adaptarme lo antes posible, seguro que no hay problemas", añadió.

Por su parte, el director deportivo sólo tuvo buenas palabras para esta joya, que la ha costado a la entidad nervionense más de 7 millones, y valoró como acertado lo pagado por él: "Es poco conocido en España, aunque en la convocatoria de la selección olímpica Messi, Agüero, Lavezzi y Lautaro son los delanteros, y se han quedado fuera Higuaín y Zárate, ambos bastante más caros que Lautaro. Algo tendrá el agua cuando la bendicen; es un precio importante el de Acosta, pero creo que era justo y necesario para adquirirlo".