Marc Márquez (Honda) regresa de las vacaciones con el reto de mantenerse imbatido en el Gran Premio de Indianápolis de MotoGP, que este fin de semana se disputa en el circuito de Brickyard.

Tanto Márquez como el resto de pilotos necesitarán nueva información sobre el trazado, 48 metros más corto en comparación con el del año pasado y que ha sido asfaltado casi por completo. Además, se han modificado cinco curvas -las número 3, 4, 7, 15 y 16- para lograr más espectacularidad y garantizar un mayor número de adelantamientos.

Márquez ya se impuso el año pasado en territorio estadounidense, de ahí que sea el máximo favorito a la victoria, sobre todo después de haber logrado encadenar un pleno total de triunfos en lo que va de temporada al ganar los nueve grandes premios disputados.

Si alguien puede plantar cara al líder del mundial, que dispone de un colchón de 77 puntos, ése es su compañero de equipo, Dani Pedrosa. También lo intentarán los pilotos oficiales de Yamaha, Valentino Rossi, que ganó la carrera inaugural de Indianápolis en 2008, y Jorge Lorenzo, que ha subido en cinco ocasiones a este podio. Ambos necesitan con urgencia mejorar su rendimiento.

Una ausencia destacada será la de Nicky Hayden, quien volvió a ser operado de los problemas en su muñeca. El estadounidense también se perderá el Gran Premio de la República Checa. En ambas citas lo sustituirá Leon Camier.

Será una carrera especialmente emotiva para el local Colin Edwards, quien se retirará una vez concluya la presente temporada, como ya anunció en abril durante el Gran Premio de Las Américas.

Habrá que tener en cuenta el rendimiento de Cal Crutchlow, que hace unos días anunció la rescisión de su contrato con Ducati, por lo que el año que viene pilotará una Honda Factory en la escudería que dirige Lucio Cecchinello.

Esteve Tito Rabat (Kalex), en Moto2, y Jack Miller (KTM), en Moto3, disponen de idéntica ventaja (19 puntos) respecto a sus inmediatos perseguidores, Mika Kallio (Kalex) y Álex Márquez (Estrella Galicia), respectivamente.

Rabat suma cuatro victorias en lo que va de temporada. Si bien en las dos últimas citas no estuvo demasiado afortunado -concluyó octavo en Holanda y cuarto en Alemania-, el líder del mundial espera recuperar la senda del triunfo en Indianápolis, circuito en el que el año pasado consiguió una contundente victoria.

Por su parte, Miller ha visto cómo en las últimas carreras disminuía la ventaja de la que dispuso al inicio de la temporada. El australiano ganó por última vez en Alemania y después de un par de ceros (Italia y Holanda) su máximo rival en la lucha por el título, Álex Márquez, ha logrado recortar significativamente la distancia respecto al líder, ayudado por los 50 puntos que sumó con sus triunfos en Cataluña y Holanda.