Como cada verano, un puñado de profesionales con contrato en vigor están pendientes de conocer su futuro sin saber muy bien si cuentan para el proyecto o no. Se huelen lo segundo, pero no tienen una confirmación oficial por parte del club.

La primera plantilla se pone en marcha la próxima semana (los primeros controles sanguíneos serán el lunes) y estos futbolistas tienen que volver. Rabello, Rusescu, Manu del Moral, Stevanovic, Javi Hervás... están pendientes de las gestiones del club y de -algunos casos- que haya huecos en la planificación. Otros, como Javi Varas, Trochowski o Jairo, están pendientes de que se les comunique algo. "Jairo está aquí la semana que viene y a día de hoy no hemos hablado con él. Lo que tenga que hablar será directamente con él", explicó Monchi el pasado jueves en la presentación de Denis Suárez. La situación de Varas, en cambio, es distinta: "El primero que la conoce es él mismo y su agente. Javi es jugador del Sevilla con contrato hasta final de temporada y él sabe la opinión del club".

En este sentido, el de Pino Montano tiene su hándicap en su alta ficha. El Sevilla necesita que salga para poder incorporar un portero, pero las opciones se tuercen por diversas circunstancias. Por ejemplo, el Deportivo, uno de los interesados, acabó renovando a Lux, así que tendrá que seguir esperando.

En el caso de Rabello, otro futbolista pretendido en Riazor, tiene algunos días más de permiso al haber acabado la temporada pasada más tarde en la Liga Adelante, pero debe incorporarse a la disciplina sevillista. Si su situación no cambia de aquí hasta entonces, estará en dos semanas en Costa Ballena a las órdenes de Unai Emery.

Todo esto es de vital importancia en la planificación para la próxima campaña, pues, aunque está previsto que algunos se queden sin ficha aun si no encuentran equipo, las salidas de estos futbolistas deben propiciar otras llegadas por muchas cuestiones: por hueco y por evitar una sobrecarga en la masa salarial de la plantilla, que ya de por sí necesita ser rebajada notablemente.

En la medida que jugadores que están cedidos regresan al terminar el periodo de préstamo, la carga de su ficha vuelve a pesar sobre el Sevilla y en esta faceta se tiene muy en cuenta la opinión y las líneas maestras que traza un hombre como José María Cruz.

El Sevilla tiene ahora mismo en su nómina a 31 futbolistas (contando a Luismi, Cotán y Carlos Fernández), a los que habría que sumar las incorporaciones previstas por Monchi: dos medio centros -como dijo el jueves-, como mínimo, aunque tiene en mente tres piezas más que deben cubrir huecos libres, un portero, un central y un hombre de banda derecha. En total, estaríamos hablando de 33 futbolistas y, como explicó, debe dejar la plantilla en 21 que no estén formados en la casa para respetar la norma UEFA (estos requisitos de momento los cumplen Alberto Moreno y Reyes). Así las cosas, al Sevilla le sobran al menos once futbolistas que tienen nombres y apellidos aunque el club les va a dar su sitio hasta que busquen una solución: Javi Varas, Cicinho, Trochowski, Rabello, Stevanovic, Jairo, Rusescu, Guarente, Manu del Moral, Javi Hervás y Babá.