Los tres ases del tenis mundial avanzaron este jueves con paso firme en el torneo de tenis de Madrid, donde el número uno del ranking, el español Rafael Nadal, ni siquiera necesitó desenfundar la raqueta, mientras el brasileño Thomaz Bellucci dio la gran sorpresa.

El serbio Novak Djokovic, el jugador del momento, arrasó al español Guillermo García-López por 6-1 y 6-2 en menos de una hora para lograr su vigésimo novena victoria seguida en 2011, el tercer mejor arranque de temporada de la historia. "Sé que estoy jugando grandioso ahora, pero siempre hay cosas que puedes mejorar, nunca se puede ser perfecto", dijo el número dos del mundo, dueño de una racha que lo sitúa sólo por detrás del estadounidense John McEnroe, que encadenó 42 triunfos seguidos en 1982, y del sueco Bjorn Borg, con 33 en 1980.

Federer, por su parte, demostró haberse recuperado bien de su maratón nocturno del miércoles ante el español Feliciano López, con quien jugó tres horas y tres tie-breaks, y derrotó con comodidad al belga Xavier Malisse por 6-4 y 6-3.

Pero fue Nadal el que menos problemas tuvo, ya que su rival, el argentino Juan Martín del Potro, renunció a jugar por una lesión en la cadera. "El dolor era muy fuerte", explicó el número 32 del mundo. Del Potro volará de regreso a Buenos Aires para hacerse ver por médicos en su país y no jugará la semana próxima el Abierto de Italia en Roma. Anímicamente, la situación no es nada sencilla para el argentino, ausente del circuito durante casi toda la temporada 2010 por una lesión de muñeca. "Lo siento por la gente y por Rafa, era un lindo partido para jugar, pero tengo experiencia en lesiones, no quiero arriesgar de más", añadió el argentino, que remontando desde el puesto 485 del ranking el 31 de enero protagonizó un gran inicio de temporada con los títulos de Delray Beach y Estoril. "Dolor agudo en la cadera izquierda", fue el difuso diagnóstico confirmado por la ATP, el ente rector del tenis masculino.

En el campamento de Nadal, número uno del mundo, había solidaridad con el argentino, pero alivio por haberse evitado tener que jugar contra él. "Mejor no jugar con él, ¿no? En eso soy absolutamente sincero", dijo Toni Nadal, entrenador del líder del ranking. "Pero, evidentemente, nos da mucha pena que le haya sucedido esto. No pudimos hablar con Juan Martín, pero supongo que esto es también precaución, porque Roland Garros está cerca".

Federer también sabe que el Abierto de Francia está a la vuelta de la esquina, por eso celebró haber derrotado con claridad al combativo rival que siempre es Malisse. "No tenía altas expectativas, sólo quería jugar un buen partido, y pude hacerlo. Mentalmente fue difícil, porque debí prepararme para jugar un partido totalmente diferente", dijo el suizo en referencia al choque ante López.

Por la noche llegó la sorpresa. Hacía rato que el tenis brasileño no daba un golpe, y llegó de manos de Bellucci, que recuperó en parte los recuerdos del legendario Gustavo Kuerten al derrotar al británico Andy Murray por 6-4 y 6-2 en los octavos de final de Madrid. "Esto significa mucho, hacía mucho que un brasileño no le ganaba a un top five", dijo Bellucci, número 36 del mundo, tras un partido que dominó en todo momento frente al cuarto del ranking. Bellucci, de 23 años, se medirá en la próxima ronda con el checo Thomas Berdych, vencedor del argentino Juan Mónaco por 7-5 y 6-3. En el final de la noche el español David Ferrer batió al ucraniano Sergiy Stakhovsky por 6-3 y 7-6 (7-3). Ferrer se enfrentará este viernes al invicto Djokovic por un lugar en semifinales. Nadal se enfrentará al francés Michael Llofra, vencedor del español Daniel Gimeno Traver por 1-6, 6-4 y 7-6 (7-4).

Entre las mujeres sorprendió la derrota de la número uno del mundo, la danesa Caroline Wozniacki, vencida por segunda vez en pocos días por la alemana Julia Görges. Número 27 del mundo, Görges se impuso 6-4, 1-6 y 6-3 para avanzar a cuartos de final. Once días atrás ya había batido a Wozniacki en la final de Stuttgart. "Estoy bastante orgullosa de las últimas tres semanas", dijo Görges. "Pude jugar más agresivamente, no le di ritmo". La estadounidense Bethanie Mattek-Sands batió a la italiana Francesca Schiavone por 7-6 (7-5) y 6-3 y la rusa Anastasia Pavlyuchenkova a la australiana Samantha Stosur 7-6 (7-4) y 6-3. La bielorrusa Victoria Azarenka, campeona en Miami y Marbella hace unas semanas, hizo trámite rápido por 6-0 y 6-3 ante la española Arantxa Parra Santonja.