El Real Madrid se estrelló una vez más en el campo que peor se le ha dado en los últimos 17 años, pues fue incapaz de superar a un rocoso Deportivo que ganó con un gol en propia puerta de Pepe.

Bernd Schuster planteó combatir el entramado defensivo del Deportivo con el talento de sus organizadores, pero los jugadores de Miguel Ángel Lotina le asfixiaron en el centro del campo, y evitaron que los blancos se sintieran cómodos en los últimos metros. El Madrid, impotente ante los cinco defensas blanquiazules, sólo pudo probar a Aouate con un balón colgado de Miguel Torres hasta el ecuador del primer periodo, momento en el que desistió parcialmente de su idea inicial para que el Deportivo tuviera mayor participación en el encuentro.

Sin embargo, el equipo blanco pudo haberse marchado con ventaja al descanso si Turienzo hubiera visto un penalti de Coloccini a Soldado. Los gallegos liberaron ligeramente su corsé en la reanudación y pisaron con más ambición, pero sin demasiado peligro, el campo del Madrid. Aun así, el Dépor consiguió el tanto del triunfo por medio de un mal despeje de Pepe, que coló el balón en su propia portería para desesperación de Casillas. Schuster reaccionó dando entrada a Higuaín y Robinho, pero los locales supieron defenderse bien para acabar llevándose tres valiosos puntos para alejarse de la zona baja.