¿será a la sexta? El Bádminton Rinconada busca en su decimosexta final consecutiva, que se dice pronto, recuperar el cetro nacional que no ostenta desde 2012, último año en el que alcanzó el título y tras el que encadenó cinco subcampeonatos.

El conjunto de Antonio Molina ejerce de anfitrión en el primer duelo ante La Orden, el choque de ida de la final, campeón en cuatro de los últimos cinco años.

Los últimos precedentes no son halagüeños para el cuadro cañamero, ya que además de perder cuatro finales en los últimos años esta temporada cayó en los dos enfrentamientos ante los onubenses en liga, por 2-5 en tierras sevillanas y por 4-3 en el último choque de la fase regular, al que se llegó con ambos equipos jugándose el factor cancha, que cayó del lado de La Orden.

El director técnico y entrenador equipo onubense, Paco Ojeda, manifestó que pese a ganar al CB Rinconada los dos encuentros de liga "la final es otra historia".

El entrenador rinconero podrá contar con todos sus jugadores, que afrontan el choque con un objetivo claro: mantener la final viva para la vuelta de dentro de dos semanas. Para ello serán importante los encuentros de dobles, en los que los de Molina deben intentar sorprender a su rival para después afrontar los individuales sin tanta presión.

El papel de la afición cañamera será importante en un choque que arranca a partir de las 19:30 en el pabellón Fernando Martín entre dos enemigos íntimos que se conocen muy bien. Hay cuentas pendientes en muchos aspectos, pero La Orden es favorita y el Rinconada deberá aprovechar el jugar primero en casa para pasarle a su rival la presión.