Gracias a un poderoso arreón en el cuarto de hora final, el Sevilla batió al Málaga en el duelo estelar de la decimosexta jornada en el Grupo IV. El tercer clasificado estuvo algunos minutos por delante en el marcador, pero el líder respondió con autoridad cuando tocaba.

El envite comenzó con igualdad y respeto entre ambos bandos. Ni blanquirrojos ni blanquiazules daban un paso adelante y el juego era muy pausado. A pesar del bajo ritmo, Juan Andrés pudo poner por delante a los de casa tras un muy buen centro de Iván, pero no acertó en la finalización.

Distinta fue la segunda mitad. Los malacitanos la arrancaron con mucha personalidad, siendo atrevidos con la pelota y llegando a los dominios de Alfonso. En los minutos iniciales, Benítez avisó después de una pared con Julio. Su remate se marchó fuera por poco.

Los visitantes estaban crecidos y el gol no se hizo esperar. En un saque de esquina ejecutado por Ramón, César se hizo grande en el corazón del área para cabecear a la red sin que Alfonso pudiera discutirlo. Se habían cumplido 63 minutos y el líder parecía dar síntomas de flaqueza. Sin embargo, fue entonces cuando los de Alejandro Acejo sacaron su jerarquía para remontar el encuentro. Comenzó el vendaval. Y no tardó en traducirse en triunfo para los sevillistas.

Primero golpeó Zarzana, que hizo la igualada en una jugada atropellada en el área malaguista. Casas remató, Gonzalo repelió y en la marabunta posterior a ese rechace, Zarzana metió la puntera con astucia. E instantes después llegó el 2-1. Apenas acababa el Sevilla de empatar cuando Paco se sacó un disparo cruzado desde el balcón del área para completar la remontada hispalense.

Con el Málaga ya a pecho descubierto, dejando espacios en su retaguardia, Casas hizo el tercer tanto al culminar una contra elevando el balón por encima de Gonzalo. Un nuevo gol para el killer blanquirrojo, que ratificaba la victoria. Los muchachos de Acejo, que permanecen imbatidos, se reforzaron en el liderato. Esta semana visitan al Tomares.