Que Sebastien Squillaci se convierta en nuevo jugador del Sevilla es cuestión de horas, o como mucho de algunos días. Las diferencias entre el Lyon y el Sevilla en la operación son mínimas, por lo que el galo se convertirá en ese central que tanta falta le hace a Manolo Jiménez para completar su equipo. Las formas de pago son el escollo a salvar, después de una dura y larga negociación. El Sevilla tendrá que desembolsar unos 6,5 millones por Squillaci, más un poco más según los objetivos, individuales y colectivos, que logre el jugador.

El director deportivo del Sevilla, Monchi, habló con total naturalidad de una operación que espera "no se vaya a demorar mucho en el tiempo". "Estamos negociando con el Lyon, que es un club bastante complicado y duro a la hora de negociar, como ya ha demostrado en otras operaciones. Un ejemplo es lo que tuvo que soportar el Atlético de Madrid en la compra de Coupet", afirmó el gaditano en Radio Sevilla. Marino Faccioli, director administrativo del club francés, apuntó el miércoles que las diferencias estribaban en que el Sevilla les diera "garantías financieras" para ejecutar la compra. En este sentido, Monchi explicó que quería "ser más cauto que Faccioli". "Como ya dijo él, aún nos quedan algunos aspectos que determinar. Pero es cierto que el acuerdo final está muy cerca", aseguró.

En otro sentido, el director deportivo también abordó el interés que desde Valencia se sigue teniendo en Andrés Palop. Monchi comentó que desde la presentación de Lautaro Acosta -hace justamente una semana- "no hemos vuelto a tener noticias del Valencia". "No hemos insistido más en el tema de Alexis ni ellos en el de Palop. No hay nada", sentenció.

Por último, el ex futbolista quiso acallar las numerosas críticas que recaen sobre Romaric acerca de su sobrepeso. Monchi lo achacó a que "en Sevilla somos muy dados a las exageraciones". "Antonio Escribano nos ha tranquilizado y seguro que pronto no se vuelve a hablar de esto", finalizó.