Las tres derrotas consecutivas, la última especialmente dolorosa por la falta de intensidad y convicción en su juego, harán que el foco de atención se amplíe aún más sobre un Coosur Real Betis que es colista de la ACB y que necesita reaccionar para espantar fantasmas.

El espíritu de lucha mostrado ante el Barcelona, el Unicaja, el Baskonia o el Zaragoza, aun perdiendo igualmente, cayó en Burgos de forma paralela al acierto desde más allá de la línea de los 6,75 metros, donde por primera vez en la temporada los verdiblancos firmaron una efectividad por debajo del 30% (el 27%, cuando hasta la fecha los peores días fueron contra el Valencia y la Penya con un 38%). Sin triples, parece, no hay paraíso. Y ahora el conjunto de Curro Segura se mide con un Iberostar Tenerife que apuesta más por sacar réditos del juego interior que lidera Shermadini que del tiro exterior.

No en vano, el cuadro insular es de los peores conjuntos en esta faceta y su 31,5% de acierto en el tiro de tres puntos es el segundo más bajo de la competición, sólo por delante del 30,4% que exhibe el Unicaja de Luis Casimiro.

El Betis, al contrario, lidera esta tabla con un impresionante 42,2% de acierto que antes del partido del pasado sábado rozaba el 44%. Y en este aspecto destacan los números de AJ Slaughter, seguramente el jugador más regular y en mejor forma de los béticos que figura segundo en esta clasificación en la ACB con un 56,8% (21/37), por detrás del alero del Obradoiro Mike Daum, quien firma un 66,7%, (12/18).

Junto al escolta, otros seis jugadores están en el 40% (Rivers, que estará en Tenerife una vez que se desinfla el globo sonda del Zalgiris, y Sipahi) o por encima como Obi (43,8%), Borg (46,2%), Oliver (43,5%) y Conger (42,9%), unos números que en el Tenerife sólo iguala Marcelinho Huertas (43,4%). Sin embargo, los de Txus Vidorreta tienen argumentos como para no dejar a sus jugadores tirar como demostró el martes Lundberg, que firmó la remontada canaria –perdían por 18 puntos en el tercer cuarto, 50-32– ante el VEF Riga en el partido de FIBA Champions con un triple.

El Betis lleva lanzados 249 triples (105 anotados), siendo el segundo que más lanza sólo por detrás del UCAM, con 108/268

Quizá el duelo del domingo en el Santiago Martín lo marqué tanto el acierto bético como el nivel defensivo local, la tercera mejor defensa de la liga encajando apenas 76,2 puntos por partido. Pero si el Coosur tiene su acierto habitual (casi 12 triples por encuentro) tiene ya casi la mitad de los puntos que reciben los canarios, que han perdido tres de los cinco partidos en casa (Bilbao, Baskonia y RealMadrid).

Pero los de Segura necesitan sumar desde otros puntos, porque fiarlo todo al triple no es fiable cuando la pelota no entra. Curiosamente, un 18/35 en acierto no le dio para ganar al Barcelona y últimamente lo que está marcando al cuadro sevillano es no sumar desde la personal. Es el equipo que menos tiros libres lanza (apenas promedia 13,3 por choque) y el tercero con peor porcentaje de acierto, apenas un 70%, detalles a mejorar sin duda para no fiar el todo o nada al triple.