liga endesa

Sin vendas ante una taladradora (95-69)

  • El equipo de Tabak se vio desarbolado por el juego intenso, veloz y vertical impuesto por el Andorra.

  • Shermadini superó a Mahalbasic en la zona y no hubo defensa para frenar a Antentokounmpo, dos claves.

Le faltó ambición al Betis Energía Plus y le sobraron velocidad, energía y acierto al Morabanc Andorra, que desarboló al equipo bético en una gélida noche en la localidad andorrana que contrastó con el ambiente cálido, sulfuroso, casi infernal, al que tuvieron que enfrentarse los jugadores verdiblancos en el Polideportivo. Con una salida fulgurante, 30 puntos en el primer cuarto, el Andorra encontró desde el inicio la manera de anular al Betis: las defensas con ayudas a Mahalbasic, a Radicevic y a Lockett y a correr. A base de rápidos ataques y defensas intensas, el Andorra ganaba 54-28. El Betis reaccionó en el tercer cuarto, llegándose a poner a cinco puntos, pero el conjunto andorrano respondió con un parcial de 15-0 en el inicio del último cuarto que sentenció el encuentro.

Gran parte del partido se definió en el arranque. El Andorra seguía el plan previsto. El equipo de Joan Peñarroya tiraba a canasta al mínimo atisbo de claridad, corría a los pasillos sin vértigo alguno y, sobre todo, defendía a conciencia. Pronto se vio que la batalla entre Shermadini y Mahalbasic se decantaría en favor de los locales. Y no sólo era por el físico o la calidad del pívot local, eran también las generosas ayudas de sus compañeros ejercían sobre los verdiblancos más peligrosos, con Mahalbasic en la diana. Que el austriaco acabara el encuentro con sólo dos puntos habla elocuentemente de las anclas que les colocaron durante el tiempo que estuvo en la cancha.

Tampoco supieron los béticos defender a sus figuras. El propio Shermadini, amo de la pintura, que no dejaba de percutir desde el poste bajo, finalizó con un meritorio doble-doble (22 puntos y 11 rebotes). A Albicy no lo veía nadie y dirigía a su equipo y asistía a placer. Además, explotó Antentokoumpo, que en 16 partidos no había realizado un encuentro tan completo como el de ayer. Sobrado de fuerza, el griego únicamente veía una dirección en el parqué: la vertical. Nachbar, su par, intentó pararlo pero en cambio se había cargado con dos personales en el primer cuarto. El entrenador bético, Zan Tabak, optó por defender al ala-pívot andorrano con la fuerza de Milosevic, quien se convirtió en uno lo de los más destacados entre los cajistas.

No se redujeron ni un ápice la intensidad y los porcentajes de anotación del Andorra en el segundo cuarto, periodo en el que el Betis continuó acumulando desventaja. Fue el parcial de los teóricos suplentes, con los que Tabak probó a cambiar las defensas a sistemas zonales que tampoco funcionaban. La frustración comenzó a cundir en las filas sevillanas. No era de extrañar que, dada la circunstancia, llegara una falta antideportiva cometida por Milosevic (cuando el Betis perdía de 14 en el ecuador del segundo cuarto) y una técnica señalada a Alfonso Sánchez, poco después, cuando la distancia con respecto a los andorranos se elevaba a los 18 puntos. Tanto el rebote (21-11 a favor de los andorranos en la primera mitad) como los porcentajes (por encima del 60 % en tiros de dos y más de 50 % en triples con la firma local) así como, si se quiere, la fortuna estuvieron del lado del equipo andorra.

La segunda mitad comenzó con un triple de Nachbar que presagiaba lo que fue el tercer cuarto, periodo en el que el juego y el acierto bético dieron esperanzas para una remontada que podría haber sido épica. Un parcial de 3-11 en apenas dos minutos de juego (57-39) tuvo que ser interrumpida por Peñarroya, quien olía el peligro. Ni siquiera la cuarta falta personal de Mahalbasic a falta de más de seis minutos para la conclusión del parcial, anulado por el buen hacer de Shermadini, hizo disminuir las prestaciones cajistas. Por unos instantes, Triguero hizo lo que no pudo su compañero austriaco: frenar el potencial ofensivo de la zona andorrana. Y, aunque se puso cinco puntos abajo, el Andorra sumó un 4-0 en los últimos instantes del tercer cuarto para tranquilidad de la grada (67-56).

El espejismo dio a su fin. Y tal fin se materializó con un parcial de 15-0 que volvía a distanciar al equipo fronterizo a la psicológica barrera de 20 puntos. Sentenciado el encuentro a cinco minutos del final, Peñarroya dio descanso a Albicy y Shermadini, que salieron bajo una merecida ovación de los suyos. Era la primera señal. La segunda, a falta de dos minutos, fue la entrada a la cancha de Maric, Schneider y Colom, los cachorros andorranos. El partido había terminado hacía ya mucho.

Ficha técnica:

95 - MoraBanc Andorra (30-24-13-28): Albicy (1), David Navarro (3), Antetokounmpo (14), Walker (9), Shermadini (22) -cinco inicial- Schreiner (9), Burjanadze (6), Stevic (8), Jelinek (13), Colom (7), Schneider (3) y Maric (-).

69 - Betis (19-9-28-13): Radicevic (5), Stojanovski (15), Lockett (9), Nachbar (12), Mahalbasic (2) -cinco inicial- Sánchez (-), Triguero (6), Milosevic (11), García (5) y Chery (4).

Árbitros: Pérez Pizarro, Cortés y Rial. Sin eliminados.

Incidencias: Partido de la decimoctava jornada de la Liga Endesa disputado en el Poliesportiu d'Andorra, ante 3.915 espectadores.

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