No está teniendo el Betis Energía Plus un comienzo de temporada para sacar pecho, pues más bien sucede todo lo contrario. Después de ocho jornadas disputadas, el equipo dirigido por Óscar Quintana es el único de los 18 que compiten en la Liga Endesa que no ha ganado todavía. Con la victoria el sábado del Burgos frente al UCAM Murcia, el cuadro verdiblanco se ha situado como colista en solitario a dos triunfos de diferencia de las plazas de salvación que marca el Joventut, pendiente aún de un partido aplazado. En la próxima jornada, además, el rival será el Real Madrid. Y en la décima, el 2 de diciembre, después del parón por los encuentros de las selecciones, el equipo viaja a Tenerife, que no son poca cosa.

Si ya es grave la acumulación de partidos perdidos, más lo es la sensación de extrema debilidad demostrada por el equipo en tres de las ocho citas, en las que sencillamente no compitió, recibiendo sendas palizas de más de 20 puntos. De la cifra de tres derrotas abultadas de ocho deriva una frecuencia media del 37,8%, es decir, más de una paliza por cada tres choques.

Contra el Gipuzkoa Básket, en la tercera jornada, el Betis sucumbió por 94-60, una diferencia de 34 puntos. En la siguiente salida, contra el Unicaja en el Martín Carpena, la desventaja fue de 28 puntos (99-71), una negativa trayectoria que culminó por el momento el domingo en Andorra (96-68), con la misma cifra de 28 puntos abajo. Teniendo en cuenta que tanto el equipo de San Sebastián como el andorrano podrían ser sobre el papel rivales directos en la pelea por el descenso, el básket-average adverso se convierte en una rémora añadida al ya de por sí nefasto inicio de la campaña, en la que, además, es la peor racha histórica de partidos perdidos de la historia del club.

Que el equipo ha de construirse desde la defensa es algo en lo que se insiste desde la pasada temporada. Pero el conjunto bético no reacciona. Si bien es el segundo que más puntos recibe de la ACB después del Burgos (89,6 puntos encajados de promedio frente a los 92,4 de los burgaleses), la diferencia de unidades a favor (592) con respecto a los puntos en contra (717) hacen del balance del cuadro sevillano el más discreto de todos: -125, por -118 del Burgos.

La entidad ex cajista se encuentra ya en la segunda temporada con el nombre del Betis, una granmarca que pierde argumentos en su gestión en la sección de baloncesto. Portar el nombre del club de Heliópolis por España no merece un trayecto de 12 palizas en los 40 partidos jugados durante esta campaña y poco, lo que arroja, en efecto, un promedio de casi una paliza de cada tres.