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Esas últimas jornadas de alta tensión

  • El Unicaja, para complicarlo todo más, se juega acabar en cuarto lugar

Radicevic lanza a canasta ante la mirada de Stevic, que pugna con Mahalbasic.

Radicevic lanza a canasta ante la mirada de Stevic, que pugna con Mahalbasic. / f. ruso / acb photo

Nadie hubiese apostado a que el Betis Energía Plus llegaría a la última jornada con opciones tras el batacazo del sábado en Santiago ante el Obradoiro. El inesperado triunfo del Manresa ante el Zaragoza Básket hace que los maños se la jueguen en casa ante un Estudiantes que deportivamente sólo puede buscar ser décimo, su mejor clasificación desde la temporada 2009-2010 (con la opción de jugar el próximo curso competición europea), pero todo puede pasar,pese a la dificultad. Y encima el Unicaja se asegurará ser cuarto si gana al cuadro hispalense.

Un ejemplo es el Caja San Fernando de la 2002-2003 de Gustavo Aranzana. En la jornada 34 recibía al Lucentum y ganar le valía para clasificarse para los play off porque al resto de implicados en la pelea (Real Madrid, TAU y Joventut) les ganaba el average. El conjunto alicantino pugnaba por el mismo premio y se impuso en San Pablo por 75-83 dejando a las cajistas fuera de las eliminatorias por el título.

También en el último partido de la 2011-2012 el Cajasol Banca Cívica de Joan Plaza perdió en el Martín Carpena por 75-66 cediendo un par de puestos en la clasificación (podía ser quinto y acabó séptimo) y quedando emparejado con el Real Madrid en las eliminatorias por el título -fue eliminado-. Con su triunfo el Unicaja de Luis Casimiro, Berni Rodríguez y DeVries, entre otros, quedó noveno y salvó su licencia de Euroliga.

También hay últimas jornadas de infarto por la salvación, como puede ser la del domingo. El bético Alfonso Sánchez fue protagonista de una hace dos campañas. Con el Fuenlabrada colista sin opciones ya, el Manresa y el Gipuzkoa pugnaban por evitar la otra plaza de descenso. Los catalanes tenían el average perdido con los donostiarras y encaraban (ambos con 10 victorias) el último encuentro del curso en decimoséptimo lugar y con todo en contra, pues visitaban al líder Real Madrid. Los vascos, que una semana antes perdieron en casa ante el Baloncesto Sevilla (67-69), que obtuvo así la permanencia, perdieron ante un Zaragoza sin opciones reales de play off, por lo que sólo el triunfo manresano en Madrid los condenaba. El conjunto dirigido entonces por Pedro Martínez hizo la machada al vencer por 80-90 tras un 22-10 en el primer cuarto.

Cierto es que este año el Zaragoza depende de sí mismo y juega en casa. El Príncipe Felipe contará con más de 10.000 espectadores apoyando a su equipo, pero eso puede ser un arma de doble filo. En la 2008-2009, por ejemplo, el conjunto maño descendió en su cancha en la última jornada. Entonces, como ahora, era el decimoquinto de una Liga de 17 conjuntos. La diferencia es que su rival en la última jornada era el decimosexto clasificado, el CB Murcia. En un partido de alta tensión y marcador ajustado (59-60), una personal en ataque del local Quinteros daba la loba a los visitantes a siete segundos del final. Taquan Dean fuese objeto de una personal protestada. Anotó el primer y lanzó el segundo a fallar con poco más de un segundo por jugar. Un vuelco en el marcador. Como pasó con la acción de Jelovac en Manresa.

En la última jornada pasan cosas. Y llegar con opciones es mejor que hacerlo ya descendido.

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