Los campeones de Alemania y España, el Borussia Dortmund y el Real Madrid, buscarán hoy imponerse en su tercer duelo en el llamado grupo de la muerte de la Liga de Campeones y dejar atrás sus modestos comienzos en los torneos locales.

Especialmente los anfitriones alemanes están de capa caída estos días. Vienen de sufrir la humillación de perder por 2-1 ante el archirrival Schalke, no consiguen hacer pie en la Bundesliga después de conquistar el doblete en la temporada pasada y acusan bajas de jugadores claves.

Tras la derrota ante el Schalke, el Dortmund quedó a doce puntos del líder, el Bayern Múnich, al que logró destronar los últimos dos años. Aun así, el carismático técnico Jürgen Klopp adelantó que su equipo está preparado para la cita que seguirán en el Westfalenstadion de Dortmund, de 65.800 espectadores. "Tenemos medios tácticos para oponernos, para hacerles la vida más difícil de lo que imaginan y vamos a disfrutar a fondo".

Las lesiones siguen siendo un grave problema para Klopp. En la derrota ante el Schalke se notó la ausencia del trío conformado por Gündogan, Schmelzer y Götze, así como de Blaszcykowski. El técnico cambió su táctica de forma sorpresiva a un sistema de 3-5-2 que nunca había sido practicado en los entrenamientos, un error que pagó caro. Aprendida la lección, Klopp retornará mañana probablemente al 4-2-3-1 que ha engrandecido al equipo desde 2008. Klopp dijo que Schmelzer y Götze ya están recuperados y serán de la partida, pero duda aún en incluir en la lista a Gündogan.

Por su parte, el técnico del Real Madrid, José Mourinho, vaticinó un partido duro, pero se mostró confiado en que sus pupilos se alzarán con la victoria. "Es un partido difícil, pero no por las bajas. Pienso que no tenemos bajas. Tenemos equipo para jugar", aseguró, e insistió en que "el adversario es difícil, el grupo es difícil; un grupo donde no estás clasificado después tres partidos, donde no puedes hacer el récord de la temporada pasada de 18 puntos de 18".

El Madrid sumó seis puntos en dos partidos y tiene una excelente oportunidad de dejar muy encarrilado su pase dentro del grupo más complicado. Tras un inicio de temporada discreto, parece que el equipo blanco va encontrando ritmo y regularidad, por más que su juego todavía esté lejos del exhibido en muchos momentos de la pasada temporada.

El Real Madrid llegó a Dortmund sin laterales por las lesiones de Arbeloa, Marcelo y Coentrao. Al igual que lo hizo ante el Celta, Mourinho enviará al campo a Essien, dejando a Sergio Ramos en el lateral derecho. A cambio, el técnico recupera al alemán Sami Khedira, quien formará con Xabi Alonso en la medular.