Andrés Palop Cervera. Jugador del Sevilla F.C.

"Cuando concretemos el juego, la gente se va a divertir"

  • El capitán del Sevilla cree que es "injusto" centrar las críticas en Jiménez y solicita un margen de confianza para un grupo que se dispone a vivir un año preñado de hermosos retos

-Qué largo se hace un parón liguero cuando se pierde, ¿no?

-Cuando se pierde el parón no viene nada bien, se hace muy larga la semana. En cinco años es la primera vez que me pasa en el Sevilla, es nuevo esto de empezar perdiendo y quieres resarcirte de la derrota, estamos entrenando bien y podemos desquitarnos ante el Zaragoza.

-¿Le extrañan tantas y tan aceradas críticas al primer traspié?

-Nos extraña porque en pretemporada hemos ido de menos a más. En el Carranza ya dimos una mejor imagen y vimos ilusionada a la gente. En Valencia nos salió un partido muy malo, creo que en toda la temporada no habrá un partido igual que ése. Y a la primeras de cambio nos encontramos con unas críticas muy fuertes. Es una corriente que viene del año pasado. La gente, a la mímina, se ha vuelto tan exigente que no está conforme con que perdamos. Se ganará y se perderá, pero el equipo se ha ganado una confianza que no se puede perder en una jornada, ni se puede criticar tan fuerte. No es justo que las críticas se centren en una sola persona, hay que repartir culpas.

-Ha cambiado la perspectiva de la afición del Sevilla, ¿o no?

-El ambiente ha cambiado un poco, nos muestran en cada partido su fuerza, pero no es el nivel de presión de hace tres años. Con esa presión se hacía muy difícil para el rival jugar en este campo. Recuerdo que nos decían que así era imposible ganar en el Sánchez-Pizjuán, se quedaban estupefactos. Y yo no lo percibo igual y eso no nos ayuda. Es verdad que a veces no están viendo lo que quieren ver, pero cuando entremos a jugar nos tenemos que olvidar de todo. Tenemos que ser fuertes en todo, en equipo, en afición, en prensa...

-Quizás el nivel de exigencia subió demasiado tras los títulos.

-Si no asumes de donde vienes ni eres realista te pueden confundir tantos títulos. Fue una etapa magnífica, espectacular, queremos repetirlo, pero sin ellos no podemos volver a hacerlo. Son ciclos y por ahí han pasado el Barcelona, el Madrid, el Valencia, el Villarreal... Jugábamos de memoria, se ha ido gente y ha venido otra. Pero hay un equipo muy fuerte, muy compacto, y los resultados llegan; a lo mejor el espectáculo no es tan grande, pero esta plantilla se deja la piel.

-¿Cómo vive la plantilla el permanente cuestionamiento al técnico?

-Llega a cansar que se critique a una persona. Las críticas, como él dice, ayudan a crecer. El partido de Valencia no sólo puede tener una lectura negativa hacia él, todos los que jugamos teníamos que haber sido criticados. El focalizar en una persona no es justo, nos sienta mal que siempre sea una crítica tan fuerte hacia algunos miembros.

-¿Alguna vez se ha quejado Jiménez a usted, como capitán, de ello?

-Nunca ha venido a quejarse de que lo están criticando. Lo que sí me dijo desde un primer momento es que le gusta que no haya ningún problema, que si hay un compañero con una situación mala, que lo arropemos, como pasó con Mosquera. Pero nunca ha venido a decirnos 'se están pasando conmigo'. No quiere trasladar eso al equipo.

-¿Por qué cree que ocurre esto?

-Tenemos el récord de victorias fuera de casa, y eso no es casualidad, eso no llega jugando mal. Esto hay que considerarlo y hay que verlo. Fuera de esta ciudad hay opiniones de peso que hablan muy bien del Sevilla, te dicen que es un equipo difícil de jugarle, un grandísimo equipo. Son opiniones muy contrapuestas, porque estás aquí y pareces un equipo del montón y fuera te tratan como un equipo Champions; eso te confunde mucho. Lo que manda es el trabajo, lo que hagamos día a día, que haya unión, tener las idea claras, y a partir de ahí, agradar a todo el mundo. Mientras, ahí están los resultados.

-En Valencia no se pudo ni atisbar el concepto trabajado de equipo...

-El rodaje ya lo tenemos que tener, no hay margen de tiempo. Pero el concepto de equipo es muy exigente y si no lo llevamos todos a rajatabla vienen los problemas. Lo que se nos está exigiendo es duro, sobre la base de una presión constante, con robo de balón en la zona de arriba. Tienes que correr mucho y estar muy bien físicamente, nos exige elaborar y finalizar. Es un juego muy atractivo y preciso que cuando lo concretemos la gente se va divertir. Es un fútbol de mucha garra, dinámica y fuerza, y con la calidad que tenemos... Si lo plasmamos, la gente se divertirá mucho.

-¿Puede aspirar realmente el Sevilla a luchar por la Liga?

-Para aspirar a campeón de Liga o estar a la altura de Madrid o Barcelona, primero tenemos que demostrarlo en el campo. Con presupuestos mucho más altos que el nuestro, ponernos a su altura es una presión añadida innecesaria. Yo lo veo como un objetivo que debe durar varios años, seis, siete. Y si sigues así tendrás un nombre en España y en Europa y eso te va ayudar a equipararte a ellos, salvando la distancia económica. Hay que aspirar a la Champions, dar la sorpresa algún año... No es de un año para otro.

-¿Cree que habrá dos ligas?

-Eso ya se verá, todo el mundo dice que habrá dos ligas. Para las críticas es muy pronto y también para decir que habrá dos ligas. Por lo que han fichado y lo que han demostrado en el campo, Madrid y Barcelona son favoritos a todo, pero hay que jugarlo todo, ir a todos los campos, está la Champions, la Copa, los sancionados, los lesionados, quien esté más o menos fresco o unido. Todo eso cuenta, y si eso lo tenemos nosotros atado podemos estar ahí junto a ellos. Incluso por delante, pero eso hay que verlo con el transcurrir de la temporada.

-¿Y en la Champions, cuál debe ser el papel del Sevilla?

-No descartamos nada. No lo digo en el sentido de ser campeones, es casi imposible, pero estando yo en un Valencia principiante en el torneo, con ilusión y con ganas, llegamos a dos finales, y no era más equipo que el Sevilla actual. Estaba bien armado y las cosas se hacían a rajatabla, con una ilusión tremenda. Es un buen ejemplo. Primero pensamos en la fase de grupos, luego en los octavos, los cuartos. Si llegamos a semifinales, sería la bomba, y la final... Pero el Mónaco y el Oporto tampoco tenían más equipo que el Sevilla y ahí estuvieron.

-¿La Copa sí es una espinita que tiene el equipo clavada?

-Para nosotros fue un éxito llegar a semifinales. Caímos en un accidente en Bilbao, pero tenemos grandes recuerdos de los cruces con el Deportivo, que entonces era el equipo más en forma de la Liga, y con el Valencia, que era el vigente campeón y la final se jugaba en Mestalla. Luego llegó Bilbao. Ojalá pudiéramos repetir el papel. No nos queda un mal recuerdo. ¿Cuántas veces ha llegado el Sevilla a semifinales?

-Me refería a que si tendrán una motivación especial tras ver la final tan cerca...

-Es una competición corta y te da opción a un título. Tenemos un equipo con muchos recambios de garantía en todas las líneas y le vamos a dar la misma importancia que a la Liga y la Champions. Yo por lo menos me mato para jugar en un equipo como el Sevilla, que es un privilegio y no lo regala nadie, y eso que yo tengo 35 años, un chaval de 22 ó 24 tendrá más ilusión aún. Vamos a competir al máximo y llegar lo más alto posible. Pero hay que ir con humilidad, capacidad de sacrificio y mucha fe en hacer una buena temporada. Hay que disfrutar de un año muy bonito, ya habrá tiempo de valorar.

-Ya que ha tocado su edad, ¿se le pasa por la cabeza retirarse aquí?

-Lo que tengo en la cabeza es disfrutar cada partido como si fuera el último. Tengo dos años de contrato y creo que me quedan dos o tres. Estoy bien mental y físicamente. Ahora tengo en la mente esta temporada, que es muy importante... Espero dar el máximo nivel, pero no me voy a arrastrar por esos campos que me han dado tanta gloria... Lo que quiero es ayudar al máximo, con el orgullo de jugar en el Sevilla.

-Javi Varas lo puso el otro día como ejemplo a seguir...

-Es un orgullo. Su actitud es digna de elogio, porque es un puesto muy difícil. Yo lo he vivido. De Javi puedo decir que ha sido mi mejor compañero, me demuestra que más que competencia, ofrece siempre ayuda, nos apoyamos y el beneficiado es el Sevilla. Y él, que puede ser el portero titular del Sevilla.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios