Más de una noche habrá soñado Antonio Álvarez con lo que hoy va a vivir a eso de las diez de la noche, cuando asome por la bocana de vestuarios del Ramón Sánchez-Pizjuán como máximo responsable técnico del Sevilla. De su Sevilla. Pero las circunstancias no son precisamente idílicas. Él es el primero que lo sabe y por eso trata de convencer a la plantilla de que hasta hace poco, formaban un buen equipo de fútbol.

Adelantó un día su comparecencia ante los medios de comunicación para que sus palabras se vieran reflejadas en los periódicos. Y, lógicamente, lanzó un mensaje optimista. Para eso está: "Los jugadores han dado un gran giro, se ha trabajado bien estos días, con mucho dinamismo para ganar confianza".

Subrayó el marchenero que está "muy orgulloso del equipo" y "convencido de que va a escalar y colocarse en el sitio que debe" pero advirtió que "todo lo que se trata de inculcar necesita refrendarse con un buen resultado".

Para el preparador sevillista, "lo ideal es jugar bien, atacar y que no te metan goles", de modo que su intención es "jugar en campo rival mucho tiempo y presionar arriba, para tener poca incertidumbre en el área propia", pero insistió en que "todo pasa por una victoria el sábado, así es como se recupera de verdad un grupo. Tenemos que ganar sí o sí. Nos daría tiempo a trabajar igual, pero con plus de confianza".

Álvarez considera "olvidado el resultado de Villarreal", que "fue un punto para empezar a reflexionar, pero el trabajo ha sido espectacular esta semana", pues los jugadores "han ido cogiendo moral y adquiriendo confianza".

El técnico sevillista admitió que "puede ser que exista cierta ansiedad" pero no se siente responsable del pasado, pues sus "cuentas son desde Villarreal para adelante. Hay nueve partidos por delante y habrá que ganar el mayor número posible de ellos".

El que fuera gran líbero del Sevilla en los años ochenta vaticinó que "el sábado habrá una buena acogida al equipo", que estará "obligado a devolver el esfuerzo con buen juego y sobre todo, con un buen resultado, aunque el Tenerife lo pondrá difícil".

Se congratuló de que Jesús Navas acortara los plazos para reaparecer, probablemente, el próximo sábado 10 ante el Málaga: "Hoy -por ayer- ya ha intentado estar. Ha hecho parte del trabajo pero cuando se preveía más contacto pues se ha reservado".