El Betis Féminas logró una abultada victoria en el Ramón de Carranza, en el duelo que servía de presentación para el Cádiz ante su público. Un partido que se puso de cara muy pronto con el tanto de Abam y que dejó en evidencia la clara diferencia de categoría existente en un equipo como el bético, asentado en la máxima renombrada Primera Ibedrola, y las gaditanas, instaladas en Primera Nacional.

No participaron las amarillas en el torneo por temor a que salieran goleadas debido al nivel superior que tenían los equipos invitados –además de los béticos, el Tottenham, el Athletic y el Tacón fueron los participantes–, algo que quedó refrendado al término del partido que midió a las heliopolitanas con las cadistas en el coliseo gaditano.

El aplastante dominio forastero quizás impidió a Antonio Contreras, nuevo entrenador del Betis Féminas, extraer conclusiones fieles. Tampoco por lo poco que se lleva trabajado, apenas una semana. Lo que sí es seguro que la goleada permite tomar confianza al equipo y lo hace sonreír, máxime después de caer de forma un tanto injusta ante el Tottenham en la primera semifinal del Trofeo Carranza.

El duelo se tiñó de verdiblanco desde el pitido inicial. El Betis Féminas demostró su nivel y ser de una categoría superior, borrando a su rival del terreno de juego. No en vano, a los diez minutos de partido, ya iba por delante gracias a un centro chut de Abam y había mandado dos pelotas al larguero. Antes del descanso, Bea Parra tuvo tiempo para hacer un doblete y Abam para ampliar su cuenta particular.

Tras el paso por los vestuarios, el Betis no levantó el pie del acelerador. Bea Parra, Priscila, Abam, Fedorova, Piemonte y de nuevo Priscila volvieron a ver puerta y dejaron la goleada en 0-10.