Continúa la mala racha del Betis B. Ayer, ante el Águilas, cosechó una nueva derrota, la tercera consecutiva, con lo que son ya cuatro las jornadas que lleva sin conocer la victoria, despidiéndose así de sus opciones de acercarse a los puestos que dan derecho al play off de ascenso.

El filial bético, que acabó con nueve hombres, al ser expulsados Rodri e Isidoro, gustó en El Rubial, causó buena impresión, dio muestras de calidad, pero careció de mordiente y no dispuso de ocasiones claras de gol, lo que le hizo sucumbir ante el mayor ímpetu y el acierto rematador del equipo murciano.

El Águilas sacó partido a su primera aproximación con peligro al área de René. En el minuto 5 José García se disponía a rematar un medido pase de Navarro cuando fue empujado por Toni. El árbitro señaló penalti y Navarro se encargó del lanzamiento de la pena máxima.

No acusó el golpe el cuadro de José Luis Mena, aunque Honorio estuvo a punto de marcar el segundo tanto en el minuto 11. Su remate fue repelido por el larguero. Isidoro se erigió en el líder bético. Animaba a sus compañeros y siempre intentaba salir de su zona con el balón jugado. Un minuto después, Parra pudo lograr el empate. Recibió un buen pase de Fran Machado y Franch se lanzó con el cuerpo para evitar que el balón entrara en su portería.

Rodri, en el 24, lanzó una falta y la pelota salió rozando el palo de la meta de Gómez. Acto seguido, René impidió que el remate de García entrara, despejando a córner. Sí marcó Tariq en el minuto 35, pero el árbitro anuló el tanto por fuera de juego.

En el segundo tiempo el Betis salió controlando, tocando y jugando bien, intentando llegar a la portería de Gómez, pero la segura defensa local impedía cualquier posibilidad de gol. En el minuto 57, Segura, Machado y Parra desaprovecharon las mejores ocasiones andaluzas. Lo que sí acusó el filial bético fue la expulsión de Rodri, que protestó una decisión arbitral. A partir de ahí la presión del Águilas fue en aumento y en los últimos minutos se volcó. En el 87 Aarón sirvió a Tariq, que batió por bajo a René y sentenció a un conjunto verdiblanco que ya se aleja de la zona de privilegio.