Rostro serio el de Manolo Jiménez tras el encuentro frente al Valladolid, que terminó con reparto de puntos entre ambos equipos.

El entrenador sevillista se mostró satisfecho con el empate logrado tras haber sufrido dos expulsiones: "La verdad es que hemos terminado con dos jugadores menos y otros dos que que estaban tocados y han acabado heroicamente; por ello hay que valorar el punto conseguido y estar orgulloso del equipo". Sobre el transcurrir del encuentro, Jiménez insistió en la búsqueda por parte de los jugadores de la victoria: "En la primera parte debimos haber hecho más, pero tras el descanso salimos con la intención de ganar el partido, aunque con las circunstancias que se dieron hay que dar por bueno el punto".

Acerca de las expulsiones sufridas por su equipo, el técnico se mostró contundente, aunque no quiso entrar a valorar la actuación del árbitro del partido: "El Sevilla no ha dado ni una sola patada y ha acabado con dos jugadores menos. El árbitro, eso sí, ha pitado lo que ha visto".

Preguntado por la expulsión de Luis Fabiano, el entrenador tiró de su experiencia como futbolista para explicar la polémica jugada: "En las escuelas de fútbol enseñan que los brazos sirven para equilibrar el salto; yo no creo que hubiese intención por parte de Luis Fabiano".

Manolo Jiménez quiso destacar el coraje del equipo para sacar adelante un encuentro que se puso difícil cuando Fazio y Luis Fabiano tuvieron que salir del césped tras ser expulsados por el árbitro: "En inferioridad hemos tirado al palo, pero es muy difícil jugar con dos menos".

Sobre el rival, el técnico se mostró rotundo: "Es un equipo muy correoso, bien plantado sobre el campo y con mucha velocidad arriba; tiene mucho mérito aguantar el resultado contra este equipo estando en inferioridad".

Por último, Jiménez fue preguntado por el uso excesivo del juego aéreo que el equipo viene mostrando en los últimos partidos: "La expulsión de Fazio ha sido por no pegar un pelotazo, igual que la ocasión que cedió Poulsen. El juego directo lo determina la presión del contrario".