María del Carmen Tehijovich está considerada como la principal carterista de España. Tiene 70 años y casi 60 detenciones en su historial. Es la matriarca del clan salmantino de las Tehijovich, especialistas en los hurtos al descuido. La abuela Carmen domina como nadie la técnica de la muleta, que consiste en colocarse una chaqueta o prenda sobre el brazo con el que comete los robos.

Así oculta sus movimientos y las víctimas apenas son capaces de darse cuenta de que lo que parece una entrañable señora mayor les está metiendo la mano en el bolso. La abuela Carmen ha perfeccionado esta técnica a base de practicarla hasta la saciedad, y ahora se la enseña a sus nietas. Con una de ellas, de 22 años, fue detenida en Dos Hermanas el pasado 11 de septiembre.

A las dos Tehijovich, abuela y nieta, se les acusa de un hurto cometido en la localidad gaditana de San Fernando el día 3 de este mes. Allí, en un conocido establecimiento de confección, le robaron el bolso a una persona mayor. Se llevaron un teléfono móvil de alta gama, dinero, documentación y objetos personales. 

Las presuntas autoras de los hechos fueron grabadas por las cámaras de seguridad del local. La Policía las identificó rápido como la matriarca del clan de los Tehijovich y una de sus nietas. Ocho días después, fueron detenidas en Dos Hermanas, donde se cree que pueden estar asentadas desde hace un tiempo. También hay miembros del clan en Sevilla, en Huelva y otras zonas del Sur de España.

Los Tehijovich son la principal organización familiar de carteristas del país. Son oriundos de Salamanca y llevan décadas cometiendo hurtos por toda España. Se desplazan de forma itinerante y aprovechan las grandes concentraciones de personas, mercadillos y fiestas para robar. De hecho, la matriarca tiene detenciones en al menos 13 provincias distintas.

Se mueven casi de forma nómada de pueblo en pueblo, aunque este año la pandemia le ha complicado las cosas y han tenido que entrar en las tiendas para robar. Aquí se enfrentan a las grabaciones de las cámaras de videovigilancia, por lo que suelen cambiar de aspecto, se ponen gorras o gafas y van modificando su apariencia. Otro inconveniente para estos carteristas ha sido la falta de turistas, pues suelen escoger a los extranjeros como víctimas, ya que generalmente no suelen volver a España para el juicio y así se libran de las condenas.

La abuela Carmen nació en un pequeño pueblo de Salamanca, Castillejo de Martín Viejo, hace 70 años. Desde niña se dedica a la delincuencia. Tiene diez hijos, cuatro hombres y seis mujeres. En esta familia, las que se dedican al hurto son las mujeres. María del Carmen ha sido la maestra de sus hijas, nueras y nietas. Otros miembros de la familia tienen antecedentes por otros delitos, casi siempre contra el patrimonio.