BBVA Research calcula que la economía española creció un 0,8% entre enero y marzo, con lo que mantiene la tasa de crecimiento del último trimestre de 2015.

En su último Observatorio Económico España, la entidad asegura que los indicadores de coyuntura sugieren que ni la economía ni el empleo se están viendo afectados, de momento, por "el entorno de mayor incertidumbre", aunque sí se observa una desaceleración en algunas partidas de la demanda doméstica.

En cualquier caso, BBVA advierte que que si la incertidumbre política en el país sigue elevada podría haber consecuencias sobre la economía en los próximos trimestres.

El crecimiento del PIB durante el primer trimestre continuó apoyándose en factores internos y externos, entre los que sobresalen el bajo precio del petróleo y la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). BBVA Research sostiene que gracias a estos factores España continuará creciendo en los próximos trimestres, hasta alcanzar un ritmo medio anual del 2,7% tanto en 2016 como en 2017. Ayer mismo, la agencia de calificación crediticia Fitch confirmó su previsión para España en 2016, con un crecimiento del 2,6% pero revisó una décima a la baja su estimación para 2017 (2,2%).

En el primer trimestre, según BBVA, El consumo de los hogares continúa liderando la recuperación con un crecimiento similar al observado al cierre de 2015, mientras que se detecta una desaceleración en la inversión empresarial, que podría ser incluso más pronunciada que la que cabía esperar a principios del trimestre.

Por el contrario, la recuperación del sector inmobiliario continuó en los primeros meses de 2016, aunque todavía sigue siendo "modesta".

Por lo que respecta al gasto público, la entidad indica que creció un 0,5% en los tres primeros meses del año, lo que supone un ritmo similar al del segundo semestre de 2015.

BBVA apunta, por otro lado, a un crecimiento moderado de las exportaciones de bienes, tras el retroceso del 0,2% del último trimestre del 2015.

Los precios mantendrán su presión a la baja, mientras que la inflación subyacente (sin energía ni alimentos frescos) podría haber aumentado hasta el 1,1 % durante el pasado mes.