La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, afirmó ayer que es "clara y manifiesta" la voluntad del Gobierno central, y más en concreto del Ministerio de Industria, para encontrar una solución al problema derivado de la supresión de la tarifa especial para regantes en 2008, que ha desembocado en un continuo aumento de precios desde esa fecha.

En su primer acto oficial tras su nombramiento, la inauguración en Huelva del XIII Congreso Nacional de Comunidades de Regantes de España, García Tejerina mostró su deseo de que este congreso sirva para tratar de hallar una fórmula que permita a los regadíos contar con un contrato de suministro adaptado a su tipo específico de consumo. Los regantes se quejan de que este se reduce a los seis meses de campaña y que el resto del año están pagando por un término de potencia que no usan y cuyo coste no ha dejado de crecer.

La ministra aseguró que el Ministerio es "plenamente consciente" de este problema, y añadió que está "trabajando" con la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore) y el Ministerio de Industria, Energía y Turismo "para atenuar el alza de los costes de la energía en el regadío, porque es un sector vital para la economía española".

García Tejerina consideró "fundamental" que, mientras tanto, los regantes prosigan con la constitución de centrales de compra que permitan generar un ahorro muy sustancial de la factura anual.

Por su lado, el presidente de Fenacore, Andrés del Campo, y el gerente la Comunidad de Regantes Palos de la Frontera (organizadora del evento) Fernando Sánchez, pidieron "ayuda" a la nueva ministra para que "presione" al Ministerio de Industria para "modificar el abusivo sistema tarifario y dar con una fórmula que les evite pagar todo el año por un servicio eléctrico que sólo utilizan durante la campaña de riego".

El presidente de Fenacore afirmó que los regantes son "conscientes" de la implicación del Ministerio de Agricultura para poder dar con una salida, pero "el tiempo pasa". Del Campo lamentó, también, que éste se haya convertido en "un asunto marginal" en la agenda política. Según especificó el presidente de los regantes españoles, en los últimos seis años la factura de la luz "se ha incrementado en una media del 100%, mientras que los costes fijos -que pagan todo el año aunque los motores estén apagados- se han disparado un 1.000", colocando a los regantes en una situación "angustiosa".