Un día después de las elecciones municipales y autonómicas, el presidente de Ciudadanos (C's), Albert Rivera, dejó muy claro que su partido no va a formar parte de gobiernos que no encabece y que, si bien ve necesaria la estabilidad, no va a apoyar a quienes quieran seguir gobernando "de espaldas a los ciudadanos". El Comité de Pactos Postelectorales se reúne hoy para fijar unos principios generales en la política de acuerdos para toda España. C's defenderá desde la oposición una política que "beneficie a los españoles" y pondrá condiciones "concretas" para negociar en torno a tres ejes: regeneración democrática, recuperación económica y cohesión social.

Rivera se mostró satisfecho por el "gran resultado" obtenido en los comicios, en los que ha conseguido 1.527 concejales -frente a los once que tenía hasta ahora- y 75 diputados repartidos en doce comunidades autónomas -frente a los nueve que tenían, sólo en Cataluña-. C'S se presentará a las próximas elecciones en Galicia y el País Vasco. No obstante, las urnas reflejaron que las encuestas electorales sobredimensionaron los resultados de Ciudadanos, que apenas consiguió la mitad de los escaños augurados. Su anunciada irrupción en el mapa autonómico como fuerza emergente no ha sido todo lo sonada que avanzaron las predicciones, que acertaron más con Podemos.

La mayoría de los sondeos sobrevaloraron el peso de C's, que en las comunidades de Aragón, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Extremadura, Madrid y la ciudad autónoma de Ceuta apenas se hizo con la mitad de los escaños que les adjudicaban hace unas semanas. En otras como Asturias, Murcia, La Rioja o la Comunidad Valenciana los pronósticos se acercaron algo más a la realidad de Ciudadanos, pero siempre por encima.