La sonrisa de Podemos -la suya y la de parte del país- se quedó helada el domingo a las nueve de la noche, cuando el fiasco despuntaba nada más iniciarse el escrutinio de votos del 26-J. La Ejecutiva morada hizo ayer un primer análisis de los resultados del 26-J, que parecen haberles desorientado porque la reunión terminó sin ninguna conclusión en firme sobre cuáles han sido los errores que han hecho fracasar sus expectativas ni tampoco a dónde debe orientar la autocrítica.

Esa es la conclusión que se desprende de las palabras del secretario de Organización del partido, Pablo Echenique, que en una rueda de prensa confirmó que no habrá dimisiones en la dirección y defendió que su estrategia de campaña y de alianza con las confluencias y con IU han sido las correctas.

Pablo Echenique tuvo que justificar la ausencia del líder de su partido, Pablo Iglesias, en la rueda de prensa, y lo hizo asegurando que había sido una decisión consensuada de la dirección que fuera el secretario de Organización el que compareciera ayer ante los medios de comunicación.

Lo que sí hizo también Echenique es culpar al PSOE, y a su estrategia en la campaña con ataques permanentes a Unidos Podemos, de ser responsable de haber "engordado a la derecha" y aumentado el voto al PP.

Tanto Echenique como Iglesias, al abandonar la reunión de la dirección, recalcaron que mantienen la mano tendida al PSOE para buscar acuerdos de las fuerzas progresistas, pero el secretario de Organización también dejó claro que no validarán el programa de Ciudadanos si se pretende reeditar el pacto que la formación de Rivera alcanzó con los socialistas y que prolonga -a su juicio- las políticas del PP.

Pero más allá de eso, se limitó a poner el acento en el fallo de todas las encuestas y los analistas políticos, que predijeron algo que no ha ocurrido y que ha frustrado sus expectativas y las de "todo el país".

Podemos, reiteró Echenique, no está satisfecho con los resultados electorales porque aspiraba a más, pero aún así recalcó que ha logrado mantener los escaños que tuvieron el 20-D (71) y que se ha consolidado el "espacio de cambio" que representa Unidos Podemos con 5 millones de votos y van a "seguir creciendo" porque cree que el cambio es "irreversible".

La autocrítica queda para más adelante porque, según explicó Echenique, la dirección de Podemos ha decidido abrir una reflexión y análisis más de fondo y sobre datos reales de las causas que han provocado que pierdan 1,2 millones de votos, y no limitarse a simples opiniones.

Los morados obtuvieron el domingo sus mejores resultados en el País vasco, donde se consumó el ansiado sorpasso a costa del PNV. De la mano de este éxito, Unidos Podemos Euskadi pedirá un estatus similar en el grupo parlamentario al que han tenido los diputados catalanes de En Comú Podem y los gallegos de En Marea, explicó a Efe el dirigente vasco y estatal Eduardo Maura.

Se trataría de que los seis diputados vascos de la coalición tengan una especie de subgrupo propio dentro del grupo "confederal" de Podemos, lo que le daría un mayor acceso a los recursos y a las portavocías. "Sería útil para Euskadi y lo tendrá que negociar" la secretaria general y diputada, Nagua Alba, con el propio Pablo Iglesias, explicó Maura.

Unidos Podemos se impuso en las elecciones en el País Vasco tanto en votos como en escaños al conseguir seis diputados y 333.730 votos (el 29,24%) y ganó en las tres circunscripciones.

Maura destacó que es un resultado "equilibrado y sólido" en los tres territorios y "lo más importante" es que se ha consolidado un "espacio político nuevo" en Euskadi con una "dinámica propia" que no depende de la tendencia de Podemos en el conjunto del Estado.