"Vamos a las urnas, calienta el sol". Muchos votantes se despertaron ayer con este estribillo en la cabeza, como si el infructuoso 20 de diciembre fuera un fantasma del pasado que borrar de un plumazo con una nueva cita electoral. Pero la resaca de los últimos comicios y el sudor frío seguían muy presentes entre gran parte de la población, que optó por ausentarse de la llamada fiesta de la democracia bien por castigo, bien por decisión propia o bien por que se abstuvieron de robarle tiempo a su domingo para ir a votar a una de los 1.092 mesas distribuidas por la provincia. La prueba está en el mejorable dato de lparticipación, que empezó con fuerza mejorando los registros del 20-D en el primer recuento de las dos de la tarde, pero que se fue diluyendo a medida que fue avanzando la tarde de una plomiza jornada electoral. Plomiza, por el plomo que cargaba el ambiente y que, solamente, se pudo combatir con un baño en la playa, un refresco en una terraza o cobijándose en el aire acondicionado de un colegio.

La de ayer fue una jornada electoral atípica. No es que faltaran las anécdotas habituales de este tipo de citas como tampoco se pasaron por alto las estampas de los más pequeños jugando a ser mayores colando el sobre dentro de la urna o de monjas emitiendo su voto, dos instantáneas que se suceden comicios tras comicios pero que siguen entrañando cierta ternura. Pero los factores del intenso calor y de las vacaciones en el horizonte sí que eclipsaron un poco la atmósfera del 26-J. Si en diciembre se hacía raro votar entre tanto adorno navideño, ayer las bermudas y las chanclas fueron el atuendo oficial de los votantes, en las elecciones más veraniegas que se recuerdan en la reciente historia del país.

Todos estos componentes se sumaron al hecho de que los 'urbanitas' han bajado este fin de semana en masa a la Costa Tropical para disfrutar de San Juan y del comienzo del verano con un chapuzón, dejando así unas elecciones algo descafeinadas. Aparte de las colas mañaneras, el resto del día todo fluyó con menos ajetreo en los colegios, donde el sonido ambiente lo compusieron los movimientos arriba y abajo de los abanicos y los zumbidos de los aparatos de refrigeración.

"Por lo que se ve hay dos tipos de gente, la que va con ilusión y la que va un poco con hastío de tener que volver a votar, lo cual hace que el calor no ayude", señaló a este periódico Jorge, un joven votante del distrito Genil, quien aseguró que no recordaba unas elecciones tan "tardías y calientes". Tanto, que más de uno acudió a las urnas en bañador para no perder la vez en la partida democrática.

Más decoro en sus vestimentas mostraron los políticos de la provincia, los candidatos y los que poseen cargo. Todos ellos quisieron inmortalizar su nuevo encuentro con las urnas y lanzar el típico mensaje para animar a la participación que esta vez no surtió demasiado efecto. Escenas parecidas a las del 20-D, con la salvedad del socialista Paco Cuenca, que votó por primera vez como alcalde de la ciudad de Granada. Igual de especial fue el proceso electoral para el presidente de la Diputación, José Entrena, quien depositó su papeleta en una mesa de Villanueva de Mesía presidida por su hija Lucía.

La jornada sólo registró una incidencia en la provincia, la de la falta de papeletas en el centro de servicios sociales La Chana, que se repuso en poco tiempo cuando se dio el aviso. Igualmente, la plataforma La Ciudad Accesible aprovechó el contexto para emitir sus reivindicaciones y lanzó una campaña por redes sociales ante su "preocupación por la falta de accesibilidad en los procesos electorales", con idea precisamente de "paliar" esos problemas y "para que todas las personas puedan votar en igualdad en las próximas elecciones que se celebren". Bajo el lema Colegio Electoral Accesible movilizaron a la gente en redes para subir fotos, comentarios o "denuncias por falta de accesibilidad que tengan lugar durante el día de hoy con motivo de las elecciones generales del 26 de junio". Antonio Tejada, representante de La Ciudad Accesible, lamentó que "en cada comicio electoral" haya que seguir denunciando "los mismos problemas".