El PSM consideró este sábado que la dimisión de Maria Antònia Munar como presidenta del Parlament era un "gesto imprescindible para restituir parte de la dignidad" a la Cámara y reiteró que la prioridad del Ejecutivo balear debe ser "continuar gobernando" y hacer frente a la actual situación económica.

Después de que el PP volviese a exigir al presidente del Govern, Francesc Antich, que presente su dimisión al frente del Ejecutivo o convoque elecciones anticipadas, fuentes del PSM aseguraron que "no es momento, por ahora" de adelantar los comicios. No obstante, reconocieron que no es un escenario que se descarte en el caso de que la situación se vuelva "insostenible".

El PSM-EN, que señaló que la renuncia de Munar era la "única salida posible" que tenía debido a su situación judicial, exigió a PP y UM que sean "implacables" en la "depuración de responsabilidades internas" en todos los casos de presunta corrupción que están vinculados a sus partidos.

Así, entendió que la "intensa desafección política" por parte de la ciudadanía obliga a que todos los partidos adquieran un "compromiso inequívoco" con la transparencia en la gestión política y en la regeneración de las instituciones democráticas.

La política en Baleares debe, según señaló el PSM-EN en un comunicado, empezar una "nueva etapa" que tenga como objetivos primordiales recuperar la confianza de los ciudadanos, algo que pasa por que PP y UM "rompan, de una vez por todas, con su pasado".

Pide medidas contundentes a UM y PP

En este sentido, indicó que el líder de los 'uemitas', Josep Melià, tiene que aclarar ante la opinión pública muchas de las cuestiones que están siendo investigadas y adoptar "medidas contundentes". En UM ha llegado el momento, sostuvo el PSM, en que las investigaciones judiciales y las confesiones de los implicados han puesto bajo sospecha "no sólo la práctica totalidad de la cúpula de UM, sino sus maneras de hacer política".

Al presidente del PP, por su parte, le piden que adopte también "medidas contundentes" contra el ex presidente del Govern, Jaume Matas, así como contra el resto de implicados en los casos de presunta corrupción.