El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, pidirá a las autoridades israelíes que "garanticen" el acceso de la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y negocien con los palestinos para "avanzar" hacia el final del bloqueo sobre este territorio, con el fin de que puedan entrar los materiales de construcción necesarios para rehabilitar las viviendas destruidas durante la última guerra con Hamás el pasado verano.

El jefe de la diplomacia española ha visitado este martes Gaza, en el primer desplazamiento de un ministro español a la Franja desde que Hamás -organización considerada terrorista por la UE y EEUU- ganó las elecciones en 2006 y tomó posteriormente el poder por la fuerza expulsando a Al Fatá, el partido del presidente palestino, Mahmud Abbas.

Acompañado por el comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNWRA), Pierre Krähenbühl, ha recorrido los barrios más devastados en la última ofensiva israelí sobre la Franja y visitado algunos proyectos financiados por España, como es el caso de un centro de desplazados y de una escuela gestionada por la ONU. 

En la escuela, ha podido hablar con algunos estudiantes, con una media de edad de 14 años. Uno de ellos le ha contado que vivía en el norte de la Franja y le ha preguntado cuándo podría volver a su casa, destruida en el último conflicto con Israel. "Haremos todo lo posible para que sea cuanto antes", le ha contestado el ministro.

En una rueda de prensa conjunta con Krähenbühl que ha despertado gran expectación en Gaza a juzgar por el número de periodistas que la han seguido, el comisionado general ha alertado respecto de la situación que viven los gazatíes, en especial los alrededor de 100.000 que siguen viviendo en condiciones inadmisibles por el lamentable estado en el que han quedado sus viviendas.

La UNWRA, que proporcionó refugio a 300.000 gazatíes durante el último conflicto, ha gastado 70 millones de dólares en ayudar a 40.000 familias a rehabilitar sus casas y ha avisado de que necesita otros 720 millones para satisfacer las necesidades más básicas de habitabilidad de los gazatíes que se encuentran en una situación más vulnerable. Hoy por hoy, la agencia sigue alojando en sus centros a 15.000 personas.

Tras alertar de las duras condiciones meteorológicas de este invierno -han muerto de frío al menos tres niños-- Krähenbühl ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que desembolsen más dinero para ayudar a la población de Gaza y a que usen su influencia para que se permita la entrada en la Franja del material de construcción, que está llegando "de forma muy, muy lenta".

Al ministro español se le ha preguntado si pedirá mañana a Israel que sea más flexible a la hora de permitir la entrada de estos materiales en la Franja. "Es necesario que Israel garantice el acceso de la ayuda humanitaria", ha respondido el ministro, que también ha apelado a la necesidad de "avanzar hacia el final del bloqueo", para lo que es necesario, ha precisado, "un alto el fuego definitivo" entre Israel y las facciones palestinas.

A este respecto, García-Margallo ha subrayado que "hay que tener en cuenta las necesidades de la población de Gaza", pero también las garantías de seguridad para Israel.

El ministro ha querido subrayar que su visita a Gaza pretende dejar patente el compromiso de España con la población de Gaza, a pesar de las actuales restricciones presupuestarias, y ha admitido que las necesidades de los gazatíes son mayores que los recursos disponibles. El comisionado general de la UNWRA ha agradecido el nivel de apoyo que han recibido de España, que ha calificado de "muy fuerte". Durante los tres próximos años, España ha comprometido una ayuda de 33 millones de euros para los Territorios Palestinos, de los que la mitad se destinará a Gaza. El ministro ha precisado que los proyectos que se financiarán en la Franja tendrán que ver con la producción de alimentos, el acceso al agua y saneamiento, salud y Derechos Humanos, entre otros.

En su intervención, el ministro ha recordado la necesidad de que se avance en el proceso de reconciliación entre Hamás y Al Fatá, así como que el Consejo de Seguridad de la ONU sea capaz de pactar una resolución unánime que abra el camino a un proceso de negociaciones entre las partes que ponga fin al conflicto de manera definitiva. 

En Gaza el ministro tenía previsto entrevistarse con el viceprimer ministro del Gobierno de unidad palestino, Ziad Abu Amer -que reside en Ramala-- pero no ha sido posible porque Israel no ha autorizado su entrada por el paso de Eretz. Tampoco ha podido verse con los responsables de los cuatro Ministerios palestinos que tienen su sede en Gaza como consecuencia de una manifestación de funcionarios del Gobierno palestino que protestaban porque no les pagan sus salarios.

Desde Gaza, el ministro se ha trasladado a una comuna israelí afectada por los cohetes que Hamás dispara desde la Franja, el kibbutz Nativ Haasara.

A su regreso a Jerusalén, García-Margallo tiene previsto reunirse con los líderes de la coalición laborista y de centro izquierda que se enfrentará al gobernante Likud en las próximas elecciones de marzo, Yitzjak Herzog y Tzipi Livni . Mañana verá al presidente israelí, Reuven Rivlin; el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman.