El presidente de la Generalitat, Quim Torra, pidió ayer al nuevo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que dé pasos y asuma "riesgos", y le urgió a abrir una negociación "de Gobierno a Gobierno" para afrontar la situación "gravísima" que vive Cataluña, que no puede durar "ni un día más".

Torra lanzó su primer mensaje a Sánchez, antes de que tome hoy posesión de su cargo, en un discurso ante el Consejo Nacional del PDeCAT, al que fue invitado por primera vez, pese a que no es militante de la formación demócrata.

Sánchez debe dejar atrás sus miedos para no convertirse en un mini Zapatero"

En un breve discurso, Torra señaló que ayer se cumplían 8 meses del 1 de octubre y recordó las cargas policiales, que achacó a un Gobierno del PP que "hoy ha caído", algo que, a su juicio, se debe "celebrar".

"Nos querían descabezados y resulta que los descabezados son ellos; los que nos querían débiles ya no están", enfatizó el presidente catalán, después de que, en la campaña de las elecciones del 21-D, la entonces vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, presumiera de haber "descabezado" al independentismo.

Torra pidió diálogo al líder del PSOE "cuanto antes" porque "esta situación gravísima que vive Cataluña no puede durar ni un día más", enfatizó en alusión a los soberanistas presos.

El portavoz adjunto de JxCat, Eduard Pujol, reclamó ayer asimismo al nuevo presidente del Gobierno que sea "valiente" para afrontar las demandas de los soberanistas, entre las que citó las relativas a los dirigentes presos y en el "exilio", levantar el 155 y acabar con la intervención financiera de la Generalitat.

En este sentido, el PDeCAT pedirá a Sánchez que levante los controles que está ejerciendo el Ministerio de Hacienda en las cuentas de la Generalitat, al margen del artículo 155, y además reclamará la retirada del decreto aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy para la facilitar la salida de las empresas de esta comunidad autónoma. Según informaron a Europa Press fuentes de la formación nacionalista catalana, consideran que la respuesta positiva a estas peticiones sería un gesto de buena voluntad del nuevo Gobierno de cara a la reapertura del diálogo.

El ministro Cristóbal Montoro estableció los primeros controles reforzados de las cuentas catalanas en noviembre de 2015, cuando obligó a certificar mensualmente la legalidad de los pagos que realizaba. En la primavera de 2017, este control pasó a ser semanal.

El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, advirtió ayer por su parte a Sánchez de que debe actuar con "entusiasmo y atrevimiento" con Cataluña y dejar atrás sus "miedos" para no convertirse en un "mini Zapatero", que prometió una España federal que no salió adelante.