La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, rechazó las palabras del presidente fundador del PP, Manuel Fraga, sobre los partidos nacionalistas recordando que "están ahí porque lo han decidido los ciudadanos" y, en democracia, "la voz de los ciudadanos es inapelable". Por su parte, la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, admitió que la expresión del veterano senador popular fue "ambigua" y que, por tanto, puede interpretarse "de manera no muy feliz".

El presidente fundador del PP dijo ayer al ser preguntado por la posibilidad de limitar el peso de los partidos nacionalistas en la política nacional que "habría que ponderar colgándolos de algún sitio"; cuando se le pidió que explicara más ampliamente esta afirmación, Fraga dijo que éstos, "por definición, son lo contrario a la defensa de España". Ante estas palabras, la vicepresidenta, desde la "posición institucional" que representa, reclamó "todo el respeto" para todos los partidos con representación parlamentaria.

"Están ahí porque lo han decidido los ciudadanos y en democracia la voz de los ciudadanos es inapelable", destacó la vicepresidenta, que tras dejar claro que no es su "estilo" valorar las declaraciones de otros representantes políticos, señaló que las declaraciones de Fraga fueron "tan desafortunadas que se descalifican por sí solas". Por su parte, Sáenz de Santamaría admitió que la expresión del presidente fundador del PP fue "ambigua" que puede interpretarse "a veces, de manera muy feliz".

La interpretación "más exacta", dijo la portavoz del PP en el Congreso, es la siguiente: "Por lo que allí le preguntaban, por el peso de los nacionalistas en relación con la composición de las Cámaras, hablaba de ponderar y de colgar, que es una expresión que en ningún caso se refiere a personas, sino a ponderar ese peso colgando las cosas en algo que en Soria le llaman una romana, un tipo de báscula". Sobre las peticiones del PSOE de que Fraga dimita, Sáenz de Santamaría pidió a los socialistas "congruencia". 

"Yo le diría al PSOE que fuera congruente. Cuando Pedro Castro, con su famosa frase que llamó a los votantes del PP 'tontos testiculares' -por 'tontos de los cojones'- no dijeron ni mú", señaló la dirigente del PP, que consideró la frase del presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) "mucho más ambigua y mucho más difícil de entender". La portavoz del PP en el Congreso no fue la única del partido en recordar las palabras de Castro de hace dos semanas para salir al paso de las declaraciones de ayer de Manuel Fraga.

El vicesecretario general de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas, consideró que el PSOE está "utilizando" las declaraciones de Fraga para que no se hable de las de Castro o de las del diputado de ERC Joan Tardà, añadiendo que le consta que el senador del PP "respeta a todas las formaciones políticas". Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, rechazó las declaraciones de Fraga, pero las distinguió de las de Castro porque el veterano senador no preside una confederación de nacionalistas, "porque si la presidiera, habría tenido que dimitir". 

Por último, el diputado de IU en el Congreso, Gaspar Llamazares, que dijo que las palabras de Fraga no le "escandalizan" y no le "extrañan en el personaje" del senador del PP. En cualquier caso, se mostró partidario de "la máxima libertad en la palabra" y sobre todo de que los cargos públicos "autorregulen sus expresiones y nadie les imponga una determinada expresión o les castigue". Sin embargo, concluyó que la sucesión de "descalificaciones e insultos" de algunos dirigentes políticos, demuestra que "no corren buenos tiempos para la política".