Un testigo protegido ha situado a uno de los procesados por los atentados en las Ramblas de Barcelona y Cambrils, Driss Oukabir, en la casa de Alcanar, donde la célula yihadista fabricaba explosivos.

Un vecino que vivía cerca del domicilio incluso reconoció ayer que se saludaba con un "hola y adiós" con el terrorista. Hasta ahora, Oukabir sólo ha reconocido haber alquilado la furgoneta con la que Younes Abouyaaqoub atropelló decenas de personas en las Ramblas el 17 de agosto,pero niega cualquier otra implicación con la célula terrorista. Ahora, este testigo lo sitúa justo en la casa desde donde los jóvenes preparaban la acción y que voló para los aires.

El juez z de la Audiencia Nacional Fernando Andreu tomó ayer declaración a éste y otro testigo protegido en el marco de la investigación del ataque, en el que murieron 16 personas y un centenar resultaron heridas, y que ha levantado parcialmente el secreto de sumario de la causa.

Al término de la comparecencia, los letrados Antonio Guerrero, representante de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), e Ignacio Fuster Fabra, abogado de varias víctimas extranjeras, explicaron que el testigo reconoció a ambos fotográficamente.

El chalé de Alcanar fue el lugar donde los terroristas estuvieron preparando la masacre y que sufrió una explosión en la que murieron varios miembros de la célula, incluido el imán de Ripoll (Gerona) y presunto cerebro de los atentados, Abdelbaki Es Satty.

Este hecho frustró sus planes de atentar en el Camp Nou y en La Sagrada Familia, y les obligó a actuar a las Ramblas y en Cambrils.

También identificó a Oukabir el segundo testigo protegido, un camarero de un bar de la localidad de Tona (Barcelona), donde el presunto integrante de la célula, apodado la Comadreja, y Abouyakoub tuvieron un encuentro el día antes de los atentados, en el que, según dijo, fue el primero quien tuvo la voz cantante.