Muchas celebrities deciden ampliar sus negocios y atreverse con el mundo de la restauración. Uno de los más destacados es el astro del fútbol Cristiano Ronaldo. El futbolista tiene dos hoteles en Portugal, junto con el grupo hotelero Pestana. Uno en su ciudad natal Funchal, situado en la Plaza del Mar y otro en Lisboa, en pleno corazón del barrio histórico de la Baixa. Ambos hoteles están dirigidos a un público joven de entre 18 y 34 años, que esté familiarizado con los dispositivos digitales, ya que los hoteles están plagados de ellos. Los establecimientos tienen tres tipos de habitaciones: la habitación CR, la CR Superior y la CR7 Suite. Esta última cuenta con dos televisores de 48 pulgadas de alta definición y una PlayStation 4 con sus gafas de realidad virtual. Los precios de las diferentes habitaciones van desde los 200 a los 1.200 euros la noche. En sus gimnasios se puede disfrutar de un programa de fitness diseñado por el propio Cristiano Ronaldo. Aunque lo que más llama la atención es la "marca Cristiano", y es que hay zonas de los hoteles que el futbolista ha personalizado a su gusto.

El mundialmente famoso diseñador Giorgio Armani posee el Armani Hotel en Dubai. Este hotel ocupa 11 plantas del emblemático rascacielos Burj Khalifa en los Emiratos Árabes Unidos. Sus 160 habitaciones de entre 45 y 390 metros cuadrados con precios que oscilan entre los 430 y los 2.100 euros la noche. Algunas de ellas disponen de un balcón con magníficas vistas al Golfo Pérsico y la Fuente de Dubái, conocida por sus espectáculos de agua y luz. El Armani Hotel Dubai también alberga la famosa discoteca Armani Privé.

Las 'celebrities' ponen su toque personal en los hoteles de los que son dueños

El área que va desde el norte de Palm Beach hasta Vero Beach, en Florida es conocida como la "Costa del Tesoro", famosa por el magnífico tesoro que llevaba la flota española que naufragó cerca de la costa en el 1715 y que le dio el sobrenombre. También por sus bellas playas, bahías y lagunas. La cantante internacional Gloria Estefan y su esposo quedaron fascinados cuando vieron el lugar por primera vez, hasta tal extremo que decidieron abrir el Costa d'Este Beach Resort hace diez años, transformándolo en un hotel de instalaciones de última tecnología y un servicio excepcional. El resort cuenta con elegantes habitaciones, con un precio medio de unos 170 euros la noche, un bar donde son famosos sus mojitos y una piscina infinita que parece confundirse con las olas que rompen a pocos metros de ella en la playa privada del hotel. En los alrededores se puede practicar submarinismo, surf y pesca en alta mar, además muy cerca hay varios campos de golf de prestigio.