Se cumple el refrán de tal palo tal astilla. Y que con el estilo se nace, no se hace. Doña Letizia hace gala de ser una mujer moderna en cuestiones de moda, siempre está atenta a las tendencias y arriesga para sorprender, casi siempre con excelentes resultados para los gurús de la moda, opinión casi nunca compartida por los más cortesanos. Un estilo y saber estar ante las cámaras que han heredado sus hijas, las infantas Leonor y Sofía; si bien es la pequeña la que mejor muestra esa genética fashion de mamá. Con tan sólo 6 años, la benjamina del príncipe Felipe ha terminado de mostrar su verdadera personalidad, enigmática, segura, muy Borbón. Así lo demostró hace unos días en la visita a su abuelo, don Juan Carlos, en el hospital donde ha sido intervenido. A su corta edad, la pequeña cedió paso a su hermana Leonor, la primogénita de los Príncipes de Asturias y, por tanto, heredera al trono de España, para que debutara como infanta comentando con la prensa que el Rey "está bien". Por tanto, supo mantener el tipo en el lugar que le corresponde derrochando estilo y saber estar. Ataviada con unos vaqueros, una camiseta blanca y una parka de estilo militar, el outfit otoñal que podría llevar cualquier it-girl, Sofía es una mini-réplica de su madre, la princesa Letizia, de la que también ha heredado el carácter y su personalidad. Tanto ha llamado la atención esta última aparición pública de la niña que incluso se ha convertido en protagonista, por primera vez en solitario, de la revista ¡Hola!

El estirón de la infanta Sofía no nos ha pillado de sorpresa. El pasado verano, en su visita a Palma de Mallorca junto a sus padres y hermana, sorprendió lo alta que está, casi alcanza a la simpática Leonor. Fue precisamente en la visita junto a su familia a la Granja de Esporles donde empezó a hacer alarde de su estilo, que se acerca tímidamente al de una adolescente, con unas sandalias de cuña, lo más 'it' para las niñas durante la temporada estival.

Sofía de Borbón Ortiz llegó al mundo por cesárea el 29 de abril del 2007 en la Clínica Ruber Internacional de Madrid, un año y medio después de que lo hiciera su hermana mayor, Leonor. La pequeña de la familia del príncipe Felipe siempre se ha caracterizado por su carácter reservado, su mirada melosa y su enorme parecido físico con su tía Cristina cuando tenía su edad. Muy diferente a su hermana, mucho más astuta y extrovertida ante las cámaras, Sofía ha ido depurando su propia forma de ser y comportarse. Sabe regalar su mejor sonrisa y cada vez posa con mayor naturalidad. Ya es toda una mujercita, nada queda de esos tropiezos a la puerta del colegio o de sus enfados por no querer ser fotografiada junto a sus célebres papás en alguno de sus escasos actos públicos.