La Audiencia Provincial de Sevilla ha estimado las medidas cautelares solicitadas para el acusado, L. A. G. de efectuar el disparo que mató a un niño de cuatro años durante una montería en la finca Las Lapas, de Guillena en enero de 2019. La abogada de la familia del menor solicitó al principio de la instrución que se retirase el pasaporte al acuado y que acudiera a firmar al juzgado más cercano los días 1 y 15 de cada mes, algo que rechazó el juez de instrucción.

Ahora la Audiencia Provincial ha impuesto medidas cautelares al autor del disparo, que está en libertad con cargos, estimando la petición realizada por la familia del menor. El hombre, de unos 60 años, tiene doble nacionalidad italo-argentina y no tiene hijos, por lo que la familia "se ha quedado mucho más tranquila con esta medida que anula el riesgo de fuga", asegura la abogada Rosario Serrano.

La abogada de la familia del niño, Rosario Serrano, explica que hay dos cuestiones que están paralizando la causa. Por un lado, el recurso de Ecologistas en Acción interpuesto ante la Audiencia Provincial por daño al medio ambiente, y por otro la solcitud del acusado de ampliar la responsabilidad al postor y al organizador de la montería. La Audiencia Provincial de Sevilla aún no se ha pronunciado sobre ambas cuestiones.

El informe de balística de la escopeta de L. A. G relaciona directamente el arma con la bala que causó la muerte del menor. El informe de balística confirmó que la munición utilizada fue de postas, algo prohibido según la Ley 8/2003 de 28 de octubre de la flora y fauna silvestres.

El acusado, que se declaró autor confenso en declaración judicial y está acusado de homicidio imprudente, no era el titular del puesto, por lo que no tenía permitido usar la escopeta, pero disparó y además, según los informes periciales, se movió de su marca para hacerlo, por lo que el disparo alcanzó al niño, que estaba en el puesto que ocupaba su familia.