La Audiencia de Sevilla ha absuelto a un indigente que fue juzgado por, presuntamente, violar a otra mujer sin techo en la sala de espera de  Urgencias del Hospital Virgen Macarena. La sentencia se basa en que el acusado lo negó desde el primer momento, la denunciante no acudió al juicio y los restos de semen encontrados en su vagina no se correspondían con el acusado.

La supuesta violación ocurrió el 18 de enero de 2018 e hizo correr ríos de tinta sobre las Urgencias de ese hospital y su obligación o no de echar a las personas sin hogar que acudían a dormir allí en pleno invierno, dada su vulnerabilidad física y psíquica.

La Fiscalía pidió para el acusado J.M.G.R., entonces de 44 años, siete años de cárcel y una indemnización de 2.000 euros para la denunciante, D.A.D, entonces de 40 años. 

La mujer aseguró que sobre las 7 horas estaba dormida en la sala de espera después de haber tomado una pastilla de Diazepan y, aprovechando su estado de seminconsciencia, el procesado le bajó el pantalón y la ropa interior y la penetró vaginalmente. 

La mujer le denunció porque le había quitado 7 euros

El abogado defensor, Juan Calle Martín, indica a este periódico que la sentencia no considera acreditado que el acusado hubiera mantenido relaciones sexuales con la denunciante y ni siquiera que lo intentara. 

Por el contrario, destaca que ni la afectada ni la única testigo, que era íntima amiga suya, acudieron al juicio para ratificar la versión dada a la Policía. La víctima ni siquiera declaró en la fase de instrucción y los análisis del Instituto de Medicina Legal determinaron que los restos de semen que tenía en la vagina no correspondían al procesado.

El indigente sí reconoció que aquella madrugada le había quitado 7 euros y un mechero a D.A.D., lo que fue el motivo para que la mujer le denunciara.

A ello se une que la única testigo, I.M., era íntima amiga de la denunciante. Esta segunda mujer declaró a la Policía que, entre sueños, vio al procesado y a la víctima mantener relaciones y poco tiempo después se despertó y les vio forcejeando y a ella con los pantalones bajados.

Este suceso dio lugar a un debate sobre las Urgencias de los hospitales, que en días de mucho frío permiten a los sin techo pasar la noche en una zona, normalmente aislada, de sus dependencias pese a las quejas de otros familiares de enfermos.