Un trabajo titánico al más elevado nivel profesional, con muchas horas de esfuerzo y jornadas sin dormir, está detrás del segundo viaje a Bruselas que ha culminado la asociación 'Sevilla quiere Metro' con el objetivo de negociar con cinco direcciones generales las opciones para que el Metro de Sevilla (líneas 3 y 2) cuente con fondos europeos.

El gran mérito de esta entidad, respaldada por casi 80 instituciones, es que la integran ciudadanos de a pie empeñados en lograr una red completa de Metro para Sevilla: un ingeniero industrial (Manuel Alejandro Moreno), un médico y profesor de Universidad  (Enrique de Álava) y un ingeniero de sonido (Víctor Aguilar). Para pagarse los gastos del viaje a Bruselas recaudaron los 600 euros que necesitaban en 9 horas, gracias a cientos de aportaciones vía crowdfunding en las redes sociales. En esta ocasión han ido acompañados por representantes políticos de la Consejería de Fomento y del Ayuntamiento de Sevilla. Hablamos con su presidente Manuel Alejandro Moreno.

-Un día entero en Bruselas, desde la mañana hasta la noche, en reuniones con cinco Direcciones General de la Comisión Europea...  

-Ha costado mucho llegar a la Comisión Europea. No se puede imaginar la de horas que le hemos echado escribiendo y enviando correos desde el verano pasado a varias Direcciones Generales europeas hasta que nos admitieron una reunión, y luego otra y otra.... Empezamos la jornada en Bruselas a las 10.00 de la mañana el jueves 26 de enero y nos volvimos el viernes 27 de enero a las 13.00 horas. Nos reunimos con cinco Direcciones Generales de la Comisión (Política Regional y Urbana, Clima, Reforma Estructural -reunión a la que también se unió la Dirección General de Economía y Finanzas- y Medio Ambiente). Todos sabían que se había firmado el convenio de financiación entre el Gobierno central y la Junta; estaban perfectamente informados. Luego estuvimos con la delegada de la Junta en Bruselas, Catalina de Miguel García, para informarle del resultado de esas reuniones y pedirle que impulsara también el Metro.   

-¿Ha sido relevante la presencia de representantes de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de Sevilla en esta visita a la Comisión Europea?

-Ha sido importante asistir a Bruselas con las dos administraciones para que vieran de primera mano las opciones reales que hay para contar con fondos europeos. Y, en efecto, han visto que se ha podido definir un plan para construir las líneas 2 y 3. Paso a paso, pero sin pausa. Los representantes de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento han visto que no hay más opciones que pedir un préstamo del Banco Europeo de Inversiones (BEI), si se quiere empezar a construir en 2024 el tramo Sur (Prado-Valme) de la línea 3. La Junta de Andalucía tiene que ser valiente y pedir este préstamo. Este tramo Sur de la línea 3 sólo podrá construirse si el Gobierno central cofinancia el 50%. Tanto la ministra de Hacienda como la ministra de Transportes han mostrado voluntad. El convenio del tramo sur ha de firmarse antes de que termine 2024.

-¿Qué condiciones tiene ese préstamo del Banco Europeo de Inversiones? 

-Lo que sabemos hasta ahora es que ese préstamo se podría devolver en un periodo de 25 a 30 años en condiciones muy ventajosas. Además, encajaría en la movilidad sostenible que potencia Europa. Ningún banco comercial da ese interés ni ese plazo de devolución. El Banco Europeo de Inversiones no tiene ánimo de lucro y da las mejores condiciones posibles. Esta entidad europea financia cómo máximo el 50%, por lo que será imprescindible que el Gobierno central financie el otro 50 %. No hay otra opción si se quiere empezar a construir el tramo sur de la línea 3 antes de 2028 (siguiente programa FEDER). Este proyecto sería elegible al encajar en la movilidad sostenible que potencia Europa en la lucha contra el cambio climático.  

Este tipo de préstamos no es nuevo para la Consejería: el BEI financió la línea 1 del Metro de Sevilla con 250 millones, el Metro de Granada con 250 millones y el Metro de Málaga con 260 millones de euros (líneas 1 y 2).

La Junta debe saber escuchar la recomendación de la Comisión Europea y pedir este préstamo para empezar la obra del tramo Sur en 2024. Si no lo pide, tendríamos que esperar a 2028 para iniciar las obras ¿cómo vamos a esperar tanto? La Ciudad de la Justicia se pone en funcionamiento este año, el Hospital Militar se inaugura al completo el 20 de marzo de este año… y actualmente ya existen graves problemas de movilidad en la zona, situación que se vuelve caótica en periodos de compras (CC Lagoh) y en los días de partido del Betis. Las obras del tramo sur tienen que empezar en 2024 y para ello la Junta necesita el préstamo.

-Hay tres requisitos importantes para garantizar la financiación europea   

-En primer lugar, es fundamental que la Junta de Andalucía se comprometa a realizar una buena ejecución del tramo Norte de la obra de la línea 3, porque eso demuestra a Europa que tenemos la capacidad de tener más inversión, y dependiendo de esta gestión podrá llegar más financiación.  

En segundo lugar, que la Consejería actúe conforme a las sugerencias de la Comisión Europea y pida un préstamo al Banco Europeo de Inversiones para el tramo Sur de la línea 3 (Prado-Valme). 

En tercer lugar, también es importante que la Junta actualice el proyecto de la línea 2 con exhaustivos estudios de demanda de viajeros, de forma que se pueda beneficiar del nuevo programa de fondos Feder que arranca en 2028. Este trabajo tiene que empezar este año para llegar a 2026/2027 con un buen proyecto que presentar al siguiente programa FEDER. Si empezamos ya, llegaremos a tiempo.

Y, en cuarto lugar, que las administraciones, los ciudadanos y los medios de comunicación vayan todos en el mismo barco y sean constructivos para lograr este proyecto. Desde 'Sevilla quiere Metro' tuvimos claro al crear la asociación que nuestra misión es ayudar a la administración a lograrlo. No se puede repetir lo sucedido en cada campaña electoral. Hay que sacar al Metro de la campaña política. Lo dijo el alcalde de Sevilla en el acto de la firma del convenio de financiación: cuando las administraciones se pelean el que pierde es el pueblo.    

Nos hemos entrevistado con las tres administraciones y actualmente les estamos mandando nuestra propuesta por escrito. 

-¿Qué implica una buena ejecución del tramo Norte?

-Implica, en primer lugar, disponer de financiación, un requisito que ya tenemos tras la firma del convenio entre el Gobierno central y la Junta. El segundo requisito para una buena ejecución de esta obra es un plan de tráfico con los cortes de circulación que necesita la obra por parte del Ayuntamiento de Sevilla, que ha de pactarlos con la Junta. Con ese fin el alcalde Antonio Muñoz ha convocado una comisión técnica. El tercer requisito es que un organismo u oficina técnica coordine y compruebe la ejecución del proyecto, que irá avanzando por subtramos, cada uno de los cuales seguramente lo hará un contratista diferente. 

Esta oficina técnica debe integrar a las empresas de servicios afectados (Emasesa, Endesa, Gas Natural, Red Eléctrica, Telefónica…), a Movilidad del Ayuntamiento de Sevilla y a especialistas en Arqueología, ya que la Ronda Histórica tiene varias zonas de alto riesgo arqueológico (como la Puerta Osario). Debemos evitar sorpresas y tener un plan de actuación que evite retrasos. El Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y en Ciencias de Sevilla y Huelva (sección de Arqueología) apoya la iniciativa de 'Sevilla Quiere Metro' y ha ofrecido su colaboración para tal fin.

La Comisión va a estar vigilante. Tenemos que demostrar que tenemos capacidad de hacer el tramo norte la línea 3 conforme a lo previsto.

-¿Qué departamento ha sido clave en este viaje?

-El departamento de Política Regional y Urbana (Regional and Urban Policy) que da los fondos Feder fue el determinante. Nos estudiamos el reglamento de estos fondos y vimos que uno de sus objetivos es la revertir la despoblación de los territorios, un problema que también aqueja a Sevilla (desde 2007 hasta 2022 hemos perdido un 2,5 % de población). Este reglamento también refleja la conveniencia de impulsar la inclusión socioeconómica de comunidades marginalizadas, como la etnia gitana (“National Roma”). Se trata por tanto, de dos argumentos que justifican la necesidad de más fondos FEDER para construir la red de metro y lograr revertir una situación de emergencia social, como la que tenemos en Sevilla con 6 de los 15 barrios más pobres de España.

Aparte del préstamo del BEI, la Comisión ha dado la opción de que cuando se acabe el programa actual de los Feder (2021-2027) se analicen las partidas que no se han llegado a ejecutar para ver si estas pueden destinarse al Metro de Sevilla. Eso sólo será posible si en 2026 las obras del tramo norte de la línea 3 avanzan según lo planificado y estamos demostrando buena capacidad de gestión.

La propuesta de la Comisión Europea para la Junta de Andalucía es que el préstamo del Banco Europeo de Inversiones para el tramo Sur se pueda reducir (pasando por ejemplo de 400 a 300 millones) si se consiguen fondos FEDER adicionales en el año 2026 como consecuencia de la buena gestión del tramo norte de la línea 3.

-El viaje a Bruselas ha sido de lo más productivo

-Sí, se ha podido definir un plan factible y realista para las líneas 2 y 3 de metro. Luego llegará la 4. Tenemos que ir fase a fase, poco a poco, pero sin pausa. El plan está encima de la mesa de las tres administraciones (Ayuntamiento, Junta y Gobierno Central). Ahora les corresponde poner en marcha el plan. La sociedad civil sevillana ha sido capaz de organizarse y proponer un plan factible para el despliegue de las líneas 2 y 3. De hecho, siempre decimos que el Metro llegará a Sevilla sólo si la gente lo pide. Y es que hay una cosa clara: Sevilla vive una situación de emergencia climática y social. Por ello, Sevilla no puede seguir esperando.