Jorge Lorenzo no puedo completar el fin de semana que tenía en la cabeza. En un Gran Premio donde su fichaje por Ducati copó buena parte de la información, el piloto balear analizaba la carrera jerezana en rueda de prensa: "Rossi iba bastante más rápido, unas dos o tres décimas y se me ha escapado dos segundos, pero a mitad de carrera, cuando he empezado a recuperar con bastante facilidad porque él seguramente ha empezado a tener problemas saliendo de las curvas, yo he empezado a tener problemas en las dos rectas".

Y es que el de Yamaha señalaba a Michelin como principal culpable del segundo puesto de ayer: "El neumático no paraba de hacer 'spinning' y no avanzaba la moto. Tenía que cortar gas e ir al 80% y ahí he perdido un segundo y medio". Por ello, Lorenzo reconoce que le sabe "un poco mal porque teníamos una gran oportunidad de ganar la carrera y el neumático trasero, con este problema, nos ha hecho coger un poco de miedo e intentar reducir la velocidad para que no pasar nada y terminar la carrera".

Esa es la razón por la que el vigente campeón del mundo en MotoGP ironizara sobre la firma de neumáticos: "Vamos a ver qué neumáticos trae Michelin en Le Mans. Han mejorado el neumático delantero, hay menos caída y da más confianza, pero ahora después de los problemas de Baz y Redding, con ese cambio de compuesto en el neumático trasero, hemos pasado los problemas atrás". "Espero que Michelin, con un poco más de experiencia pueda darnos el mejor neumático trasero para todos los circuitos", finalizaba el mallorquín.

Excusas al margen, Lorenzo comentaba que al arrancar la carrera "no me encontraba muy a gusto. Todos íbamos más lentos que todo el fin de semana y Rossi iba bastante más rápido, unas 2, 3 o 4 décimas", añadiendo que "se me ha escapado dos segundos, pero a mitad de carrera, cuando he empezado a recuperar con bastante facilidad, he empezado a tener problemas en dos las rectas completamente derecho; metía marchas y el neumático no dejaba de hacer spinning y no avanzaba la moto."

El motivo era obvio: "Tenía que cortar gas y en las últimas vueltas he perdido segundo y medio". Por ello, Lorenzo destaca que "el neumático trasero me ha hecho coger un poco de miedo; he intentado reducir la velocidad para que no pasara nada extraño y coger 20 puntos. Buen resultado, porque Rossi se cayó en Austin y está detrás, pero podíamos haber arañado nueve puntos".