MOVILIDAD

Un paso más en la legislación de los patinetes eléctricos

El patinete eléctrico puede considerarse vehículo de trabajo.

El patinete eléctrico puede considerarse vehículo de trabajo. / Archivo

Al más puro estilo Ibai en la comunicación, los patinetes están llamados a revolucionar el panorama de la movilidad en nuestro país. Desde que hace un tiempo empezamos a ser conscientes de que estos vehículos habían llegado para quedarse, sobre todo en grandes ciudades para evitar atascos, reducir contaminación y agilizar el tráfico, la convivencia en las calles no está siendo fácil. La falta de regulación en un primer momento y la persistente falta de civismo por parte de algunos usuarios de forma permanente dificultan su implantación, aunque desde las administraciones se están dando pasos para su rápida adaptación al entorno. 

Recorrer la ciudad en patinete eléctrico se ha convertido para muchos en la única forma de transporte dentro del casco urbano. Y desde la Dirección General de Tráfico y el Gobierno también están decididos a hacer todo lo posible por ir mejorando la legislación al respecto. El próxima medida que se va adoptar la refleja el portal motorpasiónmoto: la instauración de un certificado de circulación para patinetes con el cual aseguraríamos las características del vehículo y su permiso para poder transitar.

Recorrer la ciudad en patinete eléctrico se ha convertido para muchos en la forma ideal de moverse por el casco urbano

Lejos quedan ya esos tiempos en los que veíamos pasar un patinete por la Avenida de forma esporádica como el niño que estrena coche de juguete el Día de Reyes. Poco a poco los patinetes han superado por momento a los peatones en las aceras, se han producido accidentes y conflictos

Uso indebido del patinete

Los patinetes eléctricos han dejado de ser un simple juguete para convertirse en todo un medio de transporte dentro de las grandes ciudades. No en vano, son capaces de desplazarnos a través del tráfico congestionado por muy poco dinero y encima de una forma totalmente ecológica. Y algunos empiezan a hacer la guerra por su cuenta y riesgo, bien por hacer la gracia bien por no tener la mínima conciencia de lo que tiene entre las manos. 

Actitudes como la del patinete playero localizado en Barcelona, una de las ciudades donde más han aumentado los accidentes con este vehículo, no ayudan a asentar un nuevo modelo de movilidad necesario también para mejorar el medio ambiente.

Bombonas de butano, cajas, banquetas...Se está extendiendo la peligrosa idea de colocar improvisados asientos en los patinete, como nos muestran los compañeros de SocialDrive, y el efecto imitación en este mundo viralizado obliga a poner medios y a destacar las sanciones previstas para este tipo de comportamientos.

Porque es evidente que este tipo de acciones están prohibidas. Existen los patinetes eléctricos con sillín, pero los que tienen un sistema de autoequilibrado, van fijados y ofrecen una máxima estabilidad. Y si no es así te expones a que te caiga una sanción mínima de 100 euros.

La DGT ya ha sacado una ley para regular el sistema de conducción o los límites de velocidad permitidos 45 km/h de velocidad máxima), unos cambios que quedaron establecidos este año pero que seguirán evolucionando en el futuro. Y ahora piensa añadir la obligatoriedad de poseer el certificado de circulación del propio vehículo. En él se recogerán las características técnicas del producto exponiendo de forma clara que el aparato respeta el Reglamento General de Circulación así como el nombre del propietario que lo utilice para su identificación.

El certificado de circulación reflejará las características técnicas del producto y el nombre del propietario que lo utilice

Este tipo de certificados estarán expedidos por el fabricante del patinete pero aún deberán esperar. Todo apunta a que podrían entrar en vigor para el año 2023, ya que actualmente se está elaborando un manual con las propiedades técnicas y mecánicas que debería tener un patinete, después debe aprobarse y por último pasar por el BOE, tal y como ha estipulado el Gobierno.

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