DIRECTO Jueves Santo en Sevilla, en directo | Semana Santa 2024

El tiempo El tiempo en Sevilla para el Jueves Santo y la Madrugada

Cambio en la casa blanca El entorno de la ex primera dama confirma la noticia

Hillary dice sí a Obama

  • La ex rival del presidente electo acepta el cargo de secretaria de Estado después de varios días de rumores y tras conversar con el futuro inquilino de la Casa Blanca

La senadora por Nueva York Hillary Clinton ha aceptado la propuesta del presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, para hacerse cargo de la Secretaria de Estado, según informó ayer The New York Times.

El diario, que cita como fuente a dos personas muy cercanas a Clinton, explica que la ex aspirante a la candidatura presidencial demócrata ha decidido renunciar a su escaño en el Senado y aceptar formar parte del nuevo Gobierno.

Clinton habría tomado esta decisión después de haber discutido con Obama sobre la naturaleza del cargo y sus planes para la política exterior, según las mismas fuentes.

Fuentes de la oficina de transición de Obama dijeron a la prensa que Clinton tenía "el camino despejado" para hacerse con la Secretaria de Estado, el puesto de mayor visibilidad y prestigio del Gobierno, después del de presidente, aunque faltaba por conocer su decisión final.

El anuncio oficial está previsto que se realice después del día de Acción de Gracias, la importante fiesta estadounidense que se celebra el próximo jueves 27 de noviembre.

La elección final de Hillary no ha sido fácil para Obama, no sólo porque durante el intenso proceso de primarias sufrió críticas despiadadas de su rival por su supuesta inexperiencia, sino por la posible incompatibilidad de su marido, Bill Clinton.

El que fuera presidente entre 1993 y 2001 está embarcado desde hace años en una ambiciosa labor de filantropía a través de la Fundación Clinton, que recaba cientos de millones de dólares de donantes de todo el mundo, muchos de ellos bajo el anonimato.

A ello se unen las conferencias y actividades de asesoramiento que realiza, por elevadas sumas de dinero, para otros Gobiernos, algunos de los cuales Hillary tendría que visitar como jefa de la diplomacia estadounidense.

El equipo de Obama ha estado analizando estas posibles incompatibilidades, pero según recoge la prensa, el nombramiento está ya decidido después de que Bill Clinton haya aceptado revelar su lista de donantes, así como pedir autorización a la Casa Blanca antes de aceptar una conferencia o futuras donaciones.

Hillary Clinton, Bill Richardson o John Kerry eran los candidatos con más posibilidades para ocupar el puesto. Mientras el presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, permanecía invisible, los analistas de las televisiones locales conjeturaron a sus anchas sobre el futuro secretario o secretaria de Estado, el jefe de la diplomacia estadounidense.

Bill Richardson, actualmente el gobernador de Nuevo México y ex embajador ante la ONU en tiempos de Bill Clinton, está considerado un experto en mediaciones en el escenario internacional. Así, en 1994 consiguió, tras negociar con Pyongyang, que se entregara el cadáver de un soldado estadounidense, quien por error entró en el espacio aéreo norcoreano y fue derribado. Richardson, al igual que Hillary, fue un rival de Obama en las primarias, pero a diferencia de la ex primera dama nunca dudó de su capacidad como comandante en jefe y tampoco dijo nunca de Obama que poseía poco más que buena retórica.

Hillary Clinton forma parte del Comité de las Fuerzas Armadas del Senado y ha visitado más de ochenta países, aun cuando gran parte de ello se produjo como primera dama, al lado de su marido Bill Clinton.

La gran baza de Hillary sigue siendo su "poder de estrella". Y una vez dentro en el gabinete, difícilmente dará un paso en falso. Pues aun cuando Hillary mostrase un apoyo sin fisuras a Obama durante la campaña, eso no significa que ambos se amen de repente. Dándole la secretaría de Estado a la ex primera dama, Obama resarce así a los 18 millones de personas que en las primarias mostraron su apoyo a Hillary y quedaron decepcionadas al comprobar que su candidata no formaba parte de la fórmula presidencial en la vicejafatura.

Obama ya tiene tanta confianza en sí mismo que finalmente ha optado por lo que consideraba más adecuado, sin tener en cuenta presiones externas.

Con ello se refieren tanto a su disposición a incorporar a fuertes competidores a su equipo de gobierno como a decepcionar a sus seguidores si lo considera necesario. Algunos expertos señalaban que sobre Obama ha podido pesar la filtración periodística de su oferta a Hillary, pues se han inflado tanto las esperanzas de los seguidores de la ex primera dama, que ahora apenas se atrevería a decepcionarles de nuevo.

Un fan de Hillary comentaba en el diario The Washington Post otra decisiva ventaja: "Ya tiene tantos trajes de chaqueta que podría dirigir las negociaciones de paz en Oriente Próxima durante seis meses sin tener que volar a casa para cambiarsede ropa".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios