Las elecciones en Italia pueden provocar cambios en la presidencia del Parlamento Europeo, a un año de los comicios al hemiciclo de Bruselas, después de que Antonio Tajani haya aceptado ser propuesto como primer ministro si Forza Italia gana y su coalición forma Gobierno.

"Agradezco al presidente Berlusconi su acto de estima hacia mí. Le he transmitido esta tarde mi disponibilidad para servir a Italia. Ahora la decisión compete a nuestros ciudadanos y al presidente de la República", señaló Tajani en su perfil de Twitter la noche del jueves en un gesto de aceptación de la propuesta de Silvio Berlusconi para ser jefe de Gobierno si se da el caso.

Diversas fuentes parlamentarias explicaron que, aunque asumiría el cargo por responsabilidad, el deseo de Tajani es permanecer hasta por lo menos el fin del mandato como presidente de la Eurocámara.

Así incluso lo reconocía el jueves el propio Berlusconi tras revelar el nombre de su candidato. "En Europa todos me han pedido que no me lleve a Tajani porque es el mejor presidente del Parlamento Europeo que ha habido", apuntó.

Sea cual sea el resultado de las elecciones de mañana, fuentes cercanas a Tajani explicaron que la próxima semana su agenda no variará y seguirá según lo previsto tanto en Bruselas como en Valencia (donde se celebrará al final de la semana una reunión del grupo popular europeo).

Tajani se encuentra en el ecuador de su mandato de dos años y medio, a 13 meses de la disolución del hemiciclo europeo antes de las elecciones a la Eurocámara del 23 al 26 de mayo de 2019.

No es el primer cambio que pueden provocar en la Eurocámara las elecciones italianas, pues también se presenta para las listas del Senado Gianni Pittella, el hasta ahora líder del segundo grupo en número de escaños, los socialdemócratas.

Ninguno de los principales grupos políticos, populares, socialdemócratas y liberales, entre otros, ha querido reaccionar sobre el paso al frente de Tajani hasta conocer los resultados de los comicios.

Antonio Tajani, nacido en Roma en 1953, fue uno de los fundadores de la conservadora Forza Italia, con la que Berlusconi entró en política en 1994, y antes había ejercido como periodista parlamentario.

Según los últimos sondeos, publicados el 16 de febrero, la coalición de derechas de Berlusconi se sitúa a la cabeza pero sin alcanzar la mayoría necesaria para gobernar, seguida por el Movimiento Cinco Estrellas en solitario y por la coalición de izquierdas liderada por el Partido Demócrata de Matteo Renzi.